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La A-11, una «prioridad» para Transportes: «No hay ninguna obra parada»La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, negó este lunes que se haya frenado la construcción de la Autovía del Duero (A-11) en la provincia de Valladolid, en relación a los tramos en ejecución entre Tudela de Duero y Olivares y ... entre esta población y Quintanilla de Arriba. «No hay ninguna obra parada. Me gustaría dejarlo claro», sentenció.
Raquel Sánchez aprovechó su visita a Valladolid este lunes para inaugurar una estación de recarga para autobuses urbanos eléctricos en la ciudad para expresar que la Autovía del Duero, que vertebra de este a oeste la Comunidad, es una «prioridad indiscutible» para el Gobierno de España por lo que además rechazó que los trabajos estén paralizados en la provincia.
De hecho, la ministra invitó a visitar la zona de obras para comprobar que siguen trabajando camiones en el lugar. Raquel Sánchez manifestó que las obras se están desarrollando como estaba previsto, con dos tramos en Valladolid en ejecución, a los que se une otro en la provincia de Soria (San Esteban de Gormaz-El Burgo de Osma), que se pondrá en servicio en verano.
Las obras del tramo Olivares de Duero-Tudela, de 20,2 kilómetros, se iniciaron en diciembre de 2019, tras contratarse en 79,1 millones en septiembre de ese año, mientras entre Olivares y Quintanilla arrancaron en noviembre de 2020, después de que se encargara por 97,99 millones en agosto de aquel ejercicio. En ambos casos el plazo de ejecución es de 36 meses (tres años).
Raquel Sánchez subrayó que el Gobierno de Pedro Sánchez ha puesto en servicio desde 2018 tres tramos de la A-11, todos en Soria, y remarcó que el volumen de los trabajos, obras y los proyectos en marcha demuestra que las obras no están «paralizadas» y que siguen «su desarrollo y su curso».
La titular de Transportes avanzó el inicio de las obras del carril segregado en la glorieta que comunicará la A-11 con la VA-30 en la ciudad de Valladolid, a lo que añadió la licitación en enero de este año de la conexión entre la Autovía del Duero y la carretera N-122 en Castrillo de la Vega (Burgos) por un presupuesto de 18,1 millones de euros (IVA incluido).
Igualmente, la ministra rechazó que su departamento esté dejando caducar los informes ambientales de los tramos pendientes de la Autovía entre Valladolid y León (A-60). Por el contrario, Raquel Sánchez aseguró que están pendientes de las declaraciones de impacto ambiental entre Villanubla y La Mudarra y entre esta población y Medina de Rioseco (Valladolid). «No me consta información sobre que haya caducado ninguna DIA, sino que está pendiente de la DIA precisamente».
También subrayó la declaración de Obligación de Servicio Público este año de tramos de alta velocidad de media distancia, así como la línea de cercanías entre Palencia-Valladolid y Medina del Campo, además de los proyectos de «humanización» de travesías en la ciudad del Pisuerga, junto con la variante este de mercancías.
En conjunto, la titular de Transportes destacó que el Gobierno de España ha multiplicado casi por cinco el volumen de la licitación de obra pública y por tres la adjudicación, lo que contrasta -dijo- con «muchos años de parálisis» de las inversiones y destacó que se han relanzado «como nunca» las actuaciones en infraestructuras.
Por otra parte, la ministra de Transportes se pronunció también a preguntas de los periodistas por la demanda de soterramiento de las vías del tren a su paso por la ciudad de Valladolid. Raquel Sánchez defendió que su departamento está trabajando con el Ayuntamiento de la ciudad en el marco de convenio de integración del ferrocarril suscrito en 2017.
Además, señaló que hay «muchas pequeñas obras» que se están desarrollando y por lo tanto están siguiendo el contenido del convenio firmado en su día por el Gobierno-Renfe y Adif-, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de la capital. «Así seguirá siendo», dijo, al menos, en lo que respecta a su departamento.
Por su parte, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, destacó que la ciudad es un «buen ejemplo» de integración «realista» del ferrocarril que se financia con «dinero concreto» y no «con promesas». Además, destacó que transformará el urbanismo de la capital, como lo hará dijo la variante este de mercancías, que ya ha concluido el túnel de San Cristóbal y que según sus cálculos entrará en servicio el «año que viene», lo que evitará que estos tráficos pasen por el tramo urbano.
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