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A. g. e.
Miércoles, 23 de noviembre 2016, 14:19
La expedición de Dulciora a Zúrich se encontró frente a la sede de Mondelez con dos gratas sorpresas. La primera, más previsible, el apoyo de los sindicatos europeos que forman parte del comité intercentros, con lo que la concentración de protesta superó las sesenta personas. La segunda fue que los principales responsables de la compañía en Europa recibieron a los manifestantes en la puerta y dialogaron con ellos sobre planes de futuro.
Hubert Webber, presidente de la compañía en Europa, aseguró que Mondelez trabaja para encontrar «una solución de última hora» que permita mantener la planta activa en Valladolid aunque sea con otras marcas y productos. Añadió, además, que cuentan con «un equipo permanente» dedicado a encontrar a alguna empresa interesada en la compra de la fábrica, aunque advirtió de que solo darán el paso «si se trata de una compañía que pueda mantener un proyecto sostenido en el tiempo».
Webber agradeció a los trabajadores su presencia en Zúrich y les aseguró que Mondelez harán todo lo posible por encontrar esa solución que otorgue una nueva vida a la fábrica de Dulciora. «Reconoce que está en proceso», explicaba Francisco Pasalodos, del comité de empresa, aunque no se conocen más detalles «porque las negociaciones están sujetas a la confidencialidad».
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