L. SANCHO
Viernes, 5 de diciembre 2014, 21:33
La ganadería que José Luis Mayoral posee en el término municipal de Castronuño, en la finca Carmona, ha sufrido en los últimos quince días dos ataques de lobo que se han cobrado la vida de dos añojos. El último, en la madrugada de ayer, cuando uno de los animales apareció devorado.
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A primeros de año, este ganadero de lidia ya sufrió seis ataques de lobos en su finca, que se cobraron la cifra de 17 cabezas, 14 de ellas recién paridas, lo que supuso la mitad de la paridera de ese año. Mayoral, ganadero y empresario en gran número de municipios de la provincia de Valladolid, y de otras como Zamora, asegura que la situación es «insoportable», pues lleva casi veinte años sufriendo los ataques del lobo en Castronuño. Especialmente en el año 1995, cuando llegó a perder hasta 33 animales.
Las pérdidas económicas por estos ataques pueden ser cuantiosas, pues se trata de hembras cuyas madres han sido seleccionadas por bravura y de machos que en un futuro pueden alcanzar el precio de 2.000 euros.
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