Borrar
Carlos Calero posa en la cafetería del Frontaura. G. Villamil

«En Valladolid, a medio plazo, el Ave acabará favoreciendo el turismo»

Carlos Calero Consejero delegado de Vincci Hoteles

Antonio G. Encinas

Martes, 11 de noviembre 2014, 13:18

Quizá la marca Vincci sea joven nació en 2001 pero la familiaCalero no es una recién llegada al sector hotelero. Rufino Calero lleva cincuenta años en el sector y ya estuvo al frente de Tryp Hoteles. Sus hijos, Carlos, Miguel Ángel,Rafael y Teresa llevan las riendas de Vincci. Y Carlos Calero, que ayer atendió a El Norte en un alto de la convención de directivos de la cadena en el Vincci Frontaura de Valladolid, asegura que su intención es seguir creciendo.

¿También ven los hoteles la salida de la crisis?

Lo que estamos viendo, y es el sentir de todos los hoteles, es que empezamos a haber algo de luz al final del túnel. Se está consolidando un crecimiento que en el año 2013 iba a tirones y sin ningún tipo de lógica. Había un mes bueno, luego dos meses fatal, luego subía el precio y no sabías por qué... Y en 2014 se está consolidando un aumento de ventas y la empresa está albergando otra vez eventos que había dejado de hacer. Porque en Vincci no ha caído la ocupación, hemos mantenido un 72-75% incluso en tiempo de crisis, pero sí había caído una barbaridad el precio medio. Porque hoteles como el que tenemos en Valladolid, donde hay poco vacacional, de lunes a viernes es empresa, y esa empresa había parado, casi había desaparecido. Hay una relación clara. Si el turismo aporta al PIB gran parte del presupuesto, y sube, pues eso es un vaso comunicante.

En Valladolid, durante unos años, se sucedieron las aperturas de hoteles:Vincci Frontaura, Marqués de la Ensenada,ACSantaAna, Nexus, Foxá... Se duplicaron las plazas. Hoy muchos están cerrados. ¿Hubo también burbuja hotelera?

Era momento para abrir. ¿Quién se esperaba esta crisis? Yo creo que nadie. Si no, no lo hubiéramos hecho. En Valladolid el Ave tiene que acabar favoreciendo. En las ciudades en las que estamos presentes y hay Ave, a corto plazo ha sido perjudicial, porque la gente no se queda a dormir, sino que vuelve. Pero a medio y largo plazo ha sido beneficioso, porque en el momento en que se recupera el turismo y hay una vuelta a la normalidad, se crece. Nosotros hemos venido a hacer la convención aquí, pero lo mismo puede hacer cualquier otra empresa. Lo que está haciendo Valladolid con la apertura de hoteles es potenciar el turismo de la ciudad y el turismo de empresas dentro del establecimiento. No creo que haya una burbuja hotelera. Lo que hay es una reordenación de las plazas hoteleras. Hemos ido absorbiendo la ocupación. La nuestra no ha variado,el precio sí. Pero confío. Creo que la situación geográfica de Valladolid es muy buena.

La queja sobre los efectos perniciosos que ha traído el Ave es común en el gremio hotelero.

A corto plazo no ha beneficiado porque la crisis nos ha condicionado. Normalmente, lo que se pierde con el Ave se gana con otro sector, pero ese sector no ha entrado en acción en este caso por la crisis. A mí antes me daba pereza por la noche coger el coche y volver a Madrid. Ahora coges el Ave y te vuelves. Pero hay que pensar que el fin de semana el Ave tiene que beneficiar. Lo que hay que hacer es acabar el ramal hacia el norte y que vengan a Valladolid desde allí. Y Valladolid tiene atractivos, tiene qué ofrecer. Hay otras ciudades con menos potencial. Cuenta con una gastronomía excepcional, el centro es una maravilla...

Quizá haya que modificar el sentido de ciudad, nunca ha sido un polo turístico como tal.

¿Por qué no? El concepto de turismo ya no es el de sol y playa. Hay un turismo gastronómico que cada vez tiene más fuerza, como el enológico. El cliente ya no viene solo al hotel. Hay que ofrecerle y paquetizarle el fin de semana. Desde el propio Vincci Frontaura ya hay ofertas que incluyen visitas a bodegas, por ejemplo.

Vincci se ha involucrado desde el principio en eventos de la ciudad. ¿Es norma de la casa?

Hay que ser proactivos. ¿Por qué un cñliente viene a mi hotel y no a otro? Hay que abrirse a la ciudad. Tenemos que abrir el bar, el restaurante, darnos a conocer en el barrio. Porque al final es un potencial económico para todos. Si yo tengo clientes, la tienda de enfrente también.

¿Y el futuro inmediato de la cadena por dónde pasa?

Hemos visto que hay un pequeño cambio de tendencia económica. Y en seis meses hemos firmado seis hoteles nuevos. Vamos a abrir Oporto, Lisboa, Valencia que abriremos en Fallas junto a la plaza del Ayuntamiento, Málaga y dos en Madrid, Gran Vía y Buen Suceso. De aquí a tres meses abrimos dos de ellos. Seguimos con crecimiento y convencidos de que las cosas van a ir cambiando. Y Portugal es un foco. Empezamos a recibir clientes en las dos direcciones, y Valladolid está muy cerca de Oporto, por ejemplo.

Han tenido que hacer reajustes de salarios pero han aguantado la crisis sin despidos masivos.

Hemos tenido que hacer malabares. El precio medio de la habitación ha bajado, la ocupación no, y hay que optimizar gastos sin que el cliente lo perciba. Nosotros vendemos calidad, ilusión. No le puedo apagar al cliente las luces. Hemos tenido que ser muy finos en cuanto a la optimización del gasto para que el cliente no percibiera una bajada de calidad. El personal se ha portado muy bien. Se han echado horas... Somos una empresa pequeña, y eso hace que el personal se involucre mucho más. Ahora tenemos que seguir con esa ocupación e incrementar el precio medio.

Más que pequeña, familiar. Con más de treinta hoteles y seis en camino...

Son treinta y cuatro hoteles abiertos ahora mismo tanto en España como en Túnez. Allí hemos visto toda su evolución como país, lo pasamos mal en 2011 con la crisis por la primavera árabe, etc., y está dando unos números muy satisfactorios. Pero si nos comparas con las grandes cadenas... Nuestro presidente Rufino Calero, su padre lleva toda la vida, era el delegado de Tryp y ahora es el presidente de Vincci. Y el equipo de Vincci proviene, en el 80%, del que teníamos en Tryp.

Esa fidelidad es buena señal.

Queremos involucrar al personal en el proyecto. La plantilla de aquí, del Vincci Frontaura, es de diez. Aquí se ve que hay gente ilusionada, como el jefe de Mantenimiento, con el que hablaba ayer, porque empiezan a notar que hay más movimiento. Están involucrados con el proyecto. Ahora mismo tenemos seis hoteles en proyecto. Y no buscamos gente de fuera para ellos, primero miramos en casa. Nuestros empleados saben que hay crecimiento y promoción interna, y que sabemos el valor de lo que están haciendo. Con diez mil empleados es muy complicado, con los 2.100 que somos ahora sabemos quién eres, cómo te llamas, lo que haces y valoramos tu trabajo.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla «En Valladolid, a medio plazo, el Ave acabará favoreciendo el turismo»

«En Valladolid, a medio plazo, el Ave acabará favoreciendo el turismo»