Borrar
Los militares descansan o leen durante el vuelo
Empotrados en el polvorín del Líbano

Empotrados en el polvorín del Líbano

Las tropas españolas de la ONU, de la que forman parte militares vallisoletanos y de otras provincias de la región, observan la escalada de tensión islamista

j. moreno

Miércoles, 3 de septiembre 2014, 11:57

Torrejón de Ardoz, siete de la mañana. Un grupo de 60 militares españoles espera a que el avión Hércules 130, procedente de Zaragoza, aterrice en la pista para cargar material y personas con destino al Líbano. Es uno de los viajes que mensualmente mantienen conectadas a las tropas españolas allí instaladas, y cuyo relevo se sucede cada seis meses aproximadamente. Pero en esta ocasión, la ruta aérea de ocho horas con un ruido ensordecedor que obliga a ponerse tapones en los oídos, aunque es rutina para los pilotos, no lo es para quienes allí llegan.

más información

En un mes, la situación en el Líbano se ha complicado más allá del conflicto enquistado con Israel, país con el que hay declarada una guerra de espera y respuesta que justifica la presencia de los cascos azules españoles en la frontera. El pasado mayo regresaron de Marjayoun 45 militares de la Agrupación de Apoyo Logístico 61 (Aalog), con sede en Santovenia de Pisuerga, pero la situación era menos frágil en esta nación con 18 confesiones religiosas, donde la Constitución libanesa de 1989 fija el reparto de la representación política en función de la confesionalidad: el presidente de la República tiene que ser cristiano; el primer ministro, musulmán suní, y el presidente del Parlamento, chií. Hasta los escaños se reparten por religiones: la mitad para los cristianos y la otra para los musulmanes.

Pero este equilibrio interno, (casi fenicio en las negociaciones) fue enturbiado por dos circunstancias: una, la guerra civil desde 2011 en Siria, país con fuerte influencia histórica en el Líbano y, ahora, a través de Hezbolá (El Partido de Dios, chií). La segunda, el avance de las milicias yihadistas desde el norte de Irak. Sus proclamas también han encontrado eco dentro de la sociedad suní libanesa a través del grupo Frente Al Nusra, muy cercano a Al Qaeda y al Estado Islámico (EI), que declaró en junio la creación del Califato y su extensión al Líbano.

En el último mes se han sucedido acontecimientos que elevan la tensión, como los combates entre milicianos del Frente Al Nusra contra el ejército libanés (2 de agosto), que dejaron al menos 36 muertos, 16 de ellos soldados libaneses, y 200 heridos. Fueron en las cercanías de la ciudad libanesa de Ersal, al norte, y como consecuencia de la captura por parte del Ejército del Líbano del líder islamista Imad Ahmed Jomaa, vinculado al EI. Hasta 2.000 islamistas se adentraron en el Líbano para liberarle. Pero no solo a él, sino también a una decena de presos radicales que están en las cárceles libanesas.

A ello se ha sumado el secuestro, la última semana de agosto, por parte del Frente Al Nusra de 43 cascos azules filipinos, en los Altos del Golán, en el tramo de la frontera siria con Israel. La ONU ha confirmado este secuestro que arriesga la labor de intermediación de las fuerzas multinacionales en este polvorín donde las potencias de Próximo Oriente financian a los grupos.

Aunque en el norte del Líbano los yihadistas han tenido que replegarse a las montañas forzados por la presión de milicianos de Hezbolá y el Ejército sirio, lo cierto es que hasta Estados Unidos ha confirmado la semana pasada que enviará armamento, por valor de 20 millones de dólares, al Ejército del Líbano para tratar de frenar la amenaza del Estado Islámico. Una remesa americana que incluiría 480 misiles antitanque guiados, más de 1.500 fusiles de M16-A4, ametralladoras, morteros y lanzagranadas.

Alerta y prevención

Y, en este escenario prebélico, ¿cuál es la situación de la base española Miguel de Cervantes? De prevención y alerta, comentan fuentes de Defensa, conscientes de la fragilidad de los integrantes de la misión de la ONU tras ocho años.

El primer contingente español que llegó al Líbano lo hizo el 15 de septiembre de 2006 con el desembarco en las playas libanesas de una unidad de Infantería de Marina. El objetivo era cumplir la resolución 1701 (2006) de Naciones Unidas por la que se establecía una Fuerza Provisional en el Líbano (Unifil en inglés) para evitar el enfrentamiento entre israelíes y libaneses. En julio de 2006, una incursión de Hezbolá en la frontera se saldó con ocho soldados hebreos muertos y el bombardeo por parte de Israel como respuesta. Se trataba de evitar la vuelta a un conflicto bélico anterior que duró 15 años (1975-1990) en el que se destruyó la bautizada como Suiza árabe por su desarrollo y riqueza.

El grueso del contingente español se encuentra en la base Miguel de Cervantes, en Marjayoun, pero también participan fuerzas en el Cuartel General de la misión de la ONU, en Naqoura, al sur del Líbano. La base fue construida con materiales adquiridos en este país por la Unidad de Apoyo al Despliegue, compuesta por ingenieros de los regimientos de Salamanca y Zaragoza.

Las fuerzas españolas, a cuyo mando se encuentra actualmente el general de Brigada Andrés Chapa Huidobro, que ha sido director de la Academia de Caballería de Valladolid hasta el pasado mes de mayo, tienen encomendadas funciones de vigilancia para el cese de hostilidades entre libaneses e israelíes, que incluyen el acompañamiento y apoyo de las Fuerzas Armadas libanesas a lo largo de la denominada Línea Azul fronteriza.

La asistencia para el desarme de los grupos armados, y las actuaciones para impedir que se produzca la venta de armas a grupos radicales, figuran entre sus otros cometidos. Pero también la resolución 1701 establece la actuación humanitaria para la población civil, por medio de programas sanitarios y educativos.

La presencia militar española en Unifil en este país se renueva anualmente por el Consejo de Ministros, con un límite de 1.100 integrantes que pueden ser desplegados en esta misión. El Parlamento español así lo acordó de acuerdo con la ley de Defensa Nacional aprobada en 2005 durante el mandato del Gobierno de Rodríguez Zapatero

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Empotrados en el polvorín del Líbano