Cuatro nuevas industrias tratan de frenar los efectos de la crisis en Argales

Desde que se puso en marcha la primera fase del polígono industrial de Argales en 1963, está zona empresarial, integrada ya en el caso urbano, no había registrado una situación tan triste. Carteles continuos con el rótulo de se alquila o se vende, naves cerradas por cese de actividades, y abandono, en algún caso, por parte de los propietarios que logran arrendarlas.

Una situación que en los últimos meses parece que se está revirtiendo con la apertura de nuevos negocios o la remodelación de antiguos locales para actividades. A la apertura del centro de cash de cadena de supermercados Lupa, de un nuevo súper de Gadis, o de las nuevas instalaciones de la papelera Europac, se suman ahora las obras que ha iniciado la empresa Flisa para instalar una lavandería industrial en la calle El Norte de Castilla (antes General Solchaga).

Esta empresa, integrada en la Fundación Once, ha adjudicado las obras a una constructora valenciana para ampliar la lavandería que tiene en este mismo polígono, y que también será atendida por personal con algún grado de discapacidad.

Flisa, que fue creada en 1990 a través del Grupo Fundosa, tiene varias líneas de negocio dedicado a la lavandería industrial y al alquiler de material textil. También efectúa trabajos de uniformidad laboral y sanitaria (con identificación), y de esterilización y suministro de equipos sanitarios. La nueva planta, que se prevé esté concluida a finales de este año, forma parte de un proyecto que está coofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, a través de la Agencia de Innovación y Financiación Empresarial (Ade) de la Junta.

Entre los clientes de Flisa están hoteles de la cadena Meliá, o empresas como Nutrexpa, Repsol, Bayer, Barclays, Nivea, Jamones Arroyo, DHL Express o la multinacional Ikea.

Además de esta iniciativa empresarial del grupo de la Once, la empresa Flume, con sede en Zaratán y dedicada a la calefacción, climatización, riego y energías renovables, ha comenzado el acondicionamiento de la antigua nave propiedad de Riegos de Castilla y León (Ricalsa), que está ubicada en una parcela de la calle Vázquez de Menchaca.

Las dificultades económicas de esta empresa, dedicada a los sistemas de riego, ha hecho que la nave saliese a la venta. Según explicaron fuentes de Flume, se espera que las obras para acondicionar este edificio, para que sea ocupado por otra empresa, finalicen en octubre. En principio la actividad que se llevaría a cabo está relacionada con la fabricación de tubos por parte de una mercantil de fuera de Castilla y León.

Precisamente son empresas de fuera de la provincia las que parece que apuestan más por asentarse en el viejo polígono, que ha visto como la crisis ha provocado el cierre de muchos de los establecimientos. Pese a ello, y a los precios de alquileres y venta (mucho más elevados que en otros como el de San Cristóbal o La Mora) Argales sigue contando con un censo de empresas que tienen una actividad consolidada.

Se trata de Nestlé, la panificadora Manrique, el Grupo El Árbol, la cadena mayorista Makro, Philips Indal, la editorial Lex Nova (Thomson Reuters), Iberdrola, Auvasa, Quesos Entrepinares, y uno de los centros del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Cerca de tres mil personas siguen trabajando en el esta zona industrial, a pesar de los cierres empresariales.

Mientras llega la recuperación, desde la Asociación de Propietarios se mira a los planes del Ayuntamiento para definir el futuro del polígono. La revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que está actualmente en marcha, deberá de fijar si las parcelas pueden asumir actividades no solo industriales sino también comerciales y de servicios. Este cambio, por ejemplo, permitiría que un hotel o una residencia se pudieran levantar.