Tareas de reforestación de la ladera de Doctor Villacián.

Reforestan el pinar talado en Parquesol con árboles frutales y plantas aromáticas

La continua caída de ejemplares sobre la calzada de la calle Doctor Villacián ha llevado a la Diputación a adoptar la medida en enero

J. Sanz

Martes, 8 de julio 2014, 11:43

La enorme calva que dejó a comienzos de año la poda de decenas de pinos de la ladera del complejo asistencial Doctor Villacián, en la calle de entrada a Parquesol, tiene los días contados. Tantos como tarden en florecer las plantas aromáticas y los árboles que están plantando estos días los operarios de la Diputación para reforestar la franja de veinte metros del pinar que taló la institución propietaria de los terrenos entre enero y febrero ante la continua caída de troncos sobre la calzada de la vía colindante.

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Los trabajadores, todos ellos alumnos de un curso de Jardinería de la propia administración provincial, comenzaron hace algunas semanas las tareas de plantación y están ultimando ahora la reforestación del pinar con árboles frutales (perales, manzanos y almendros) intercalados con distintas plantas aromáticas (romero, tomillo...), según explicaron fuentes de la Diputación.

A los pies de un autobús

La caída de un pino de veinte metros a los pies de un autobús urbano, que tuvo lugar el pasado 20 de enero cuando el vehículo circulaba por la subida de entrada al barrio no hubo heridos, llevó a la institución provincial a ordenar la tala de unos cuatrocientos ejemplares para abrir una franja de seguridad de veinte metros hacia el interior de la ladera desde el muro que da a la acera de la calle Doctor Villacián. Aquel incidente supuso la cuarta caída de un tronco sobre la vía en apenas un mes.

La tala, que concluyó a mediados de febrero, trajo consigo las críticas de los ecologistas en el sentido de advertir de que «este tipo de medidas pueden evitarse si se mantienen los bosques en buenas condiciones clareando y desbrozando la zona», algo que no ocurrió en este caso con un pinar plantado en 1975, cuando abrió sus puertas el entonces psiquiátrico Doctor Villacián. La poda radical llevaba a cabo hace cinco meses respetó, eso sí, una franja de pinos en la parte superior de la ladera. La inferior la ocuparán ahora manzanos, perales, almendros y, a corto plazo, plantas aromáticas.

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