Con las verjas de la restauración bajadas, muchos vendedores de lotería temen una fuerte caída, que ya calculan próxima al 30%. «Los bares son un apoyo muy grande para nosotros. De cara al final de la campaña no soy muy optimista pero confío en su pronta reapertura», manifiesta Pedro García, encargado de la Administración de Lotería situada en la calle Verbena de Valladolid, quien destaca que «siempre viene gente a comprar, pero este año mucha menos que los anteriores».
Los hay que buscan las combinaciones que estén de moda. Otros juegan con fechas o números en los que confían año tras año y con los que, la mayoría, han perdido más dinero del ganado. Este 2020, cada español gastará una media de 65 euros en comprar décimos para el Sorteo de Navidad, según la cifra de consignación por habitante de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE). Por comunidades autónomas, Castilla y León será, previsiblemente, la que más gasto realice en lotería, con una media de 102 euros por habitante pese a la crisis económica vigente.
Este atípico año también se refleja en los números más buscados en los décimos. «Los terminados en 5, 7, 13 o 69 siempre son demandados, pero este año no nos queda nada que termine en 20», apunta Ángel Carro, encargado de la Administración situada en la calle Regalado. Como curiosidad, este año los números más solicitados por los vallisoletanos han sido el 02020 y la fecha de inicio del confinamiento, el 14320. La única Administración de Lotería que contaba con el número que indica el año actual en Valladolid es la que se encuentra en la calle Verbena. Contaba, en pasado, porque ya está colgado el cartel de 'agotado'. Pedro García, encargado de la entidad, apunta que «el 02020 se ha agotado porque imagino que la gente quiere tener un recuerdo de este año tan complicado para todos». Destaca, sin embargo, la mala situación de las administraciones de lotería de todo el territorio y no confía en llegar siquiera a la mitad de la facturación del año pasado, incluidas las campañas del Sorteo Extraordinario de Navidad y el Sorteo Extraordinario del Niño. En ambas es cuando se registra la mayor venta de décimos año tras año.
El cierre de la hostelería ha afectado directamente a la venta de papeletas y participaciones, además de la cancelación de los eventos deportivos. En la administración de la Plaza Mayor, Julio Manuel Díez Molpeceres, su titular, que este año repartió 2,5 millones de euros de El Niño, apunta que con la pandemia «no ha habido turismo ni aficionados de fútbol, que son los que se llevan un décimo de recuerdo». La caída de visitantes y la crisis económica actual hacen que este lotero no haya querido hacer cuentas por «temor a los datos que obtenga, aunque calculo que las ventas habrán caído alrededor de un 30%», explica Julio Manuel Díez.
En este sentido, el presidente de Loterías, Jesús Huerta, lamentó que «las ventas se están resintiendo bastante». Apuntó que «es pronto para dar una cifra» porque de ahora hasta el 22 es cuando se verá la realidad, pero que va a ser «un mal año». Sin embargo, aseguró que se están estudiando distintas posibilidades para que «el año salga lo mejor posible» y animó al conjunto de la ciudadanía a participar en el sorteo como siempre.
Los loteros de la ciudad afrontan el final de año con la esperanza de poder dar un empujón a la suerte de algunos vallisoletanos que, a juicio del lotero Pedro García, «ahora hace más falta que nunca».