San Cristóbal ultima un complejo con 13 pistas de pádel y gimnasio

¿Puede ser atractivo un polígono industrial ? La primera respuesta que surge contundente es no. Sin embargo, en San Cristóbal están trabajando para cambiar esa percepción y convertir sus 400 hectáreas en una 'miniciudad' laboral a la que no le falte un detalle. La asociación que gestiona esta área empresarial ultima dos proyectos para dotar a este complejo fabril de nuevos servicios para los 1.100 negocios en funcionamiento y las 20.000 personas que cada día acuden al enclave.

El primero de ellos es un gran centro deportivo que quiere convertirse en referencia del pádel en Castilla y León. La empresa gallega Miragal Pádel Sport y la Asociación Polígono San Cristóbal, que preside Antonio Rodríguez, mantienen conversaciones «muy avanzadas» para que la parcela delimitada por las calles Oro, Plata, Pirita y Galena -la manzana en la que se ubica la sede de esta organización- acoja en los próximos meses unas completas instalaciones en las que trabajadores y visitantes puedan disfrutar de sus ratos libres. Y no solo ellos, su situación, en la paralela de la recién estrenada Ronda Exterior, la convierte en un lugar de fácil acceso que podría atraer aficionados de toda la capital y el entorno.

Los responsables del polígono cuentan ya con el beneplácito municipal para la cesión de este suelo dotacional, que ahora habrá que formalizar. Los planos para este terreno de 20.411 metros cuadrados, situado junto al nuevo Centro de Servicios y Negocios que ha levantado AGC, dibujan un edificio administrativo con restaurante, cafetería, vestuarios, zonas comunes y una gran extensión destinada a un deporte que sigue al alza.

El pádel será el protagonista de estas instalaciones, que contarán con trece pistas, de las que ocho serán cubiertas y otra estará reservada para la celebración de torneos al contar con gradas para los espectadores.

Los promotores de la iniciativa prevén también habilitar en el recinto una pista finlandesa -un recorrido que combina carrera, lanzamientos, saltos o equilibrio, entre otros ejercicios-, así como un gimnasio de 1.500 metros cuadrados en forma de L con aparatos de fitness, salas de musculación y otras actividades para poner los cuerpos a punto. El sistema de gestión elegido será el de la concesión administrativa. Al igual que en el caso de El Palero o el CDO de Covaresa la idea es convocar un concurso público al que se podrán presentar todas las empresas interesadas en la construcción y explotación del centro, cuyos precios serán fijados por el Ayuntamiento de la capital. En principio, Miragal Pádel Sport ha expresado a la asociación empresarial su interés en abordar esta obra con una inversión superior a los tres millones de euros.

El centro deportivo se situará en la zona más moderna del polígono, junto al Centro de Servicios San Cristóbal. Se trata de tres edificios levantados por AGC que pretenden convertirse en el complejo de negocios y de ocio del área industrial. Cuentan con 6.249 metros cuadrados de locales comerciales, otros 5.700 destinados a oficinas y 331 plazas de garaje.

Restaurante Gabino y hotel

En este momento de crisis la ocupación es todavía muy tímida, aunque algunas firmas han visto claras las posibilidades de este enclave. Caja de Burgos ya cuenta con una oficina, mientras que Caja España-Duero también tiene intención de abrir sucursal. Firme ha sido la apuesta del restaurador Gabino González, que ya trabaja en la adecuación de un amplio local para la apertura de un restaurante, mientras que los propietarios de este centro están negociando con un operador dispuesto a gestionar el hotel de 70 habitaciones que se incluye dentro de estos edificios de negocios.

El segundo proyecto en el que trabaja la asociación es más para consumo interno. Sin embargo, su importancia, según destaca Antonio Rodríguez, es clave para los empresarios en este momento de aprietos económicos. La Asociación Polígono San Cristóbal cuenta ya con el compromiso del Ayuntamiento de Valladolid para la cesión de una parcela en la calle Nitrógeno, en la zona de ampliación de El Carrascal, en la que se construirá un centro de recogida de residuos.

La empresa Biotran, perteneciente al Grupo Abengoa, ya ha presentado un proyecto para la edificación de esta nave en unos terrenos de 4.322 metros cuadrados. Allí los 1.100 negocios que operan en el polígono podrán llevar sus desechos de todo tipo -desde papel y cartón hasta baterías o equipos electrónicos en desuso- con el consiguiente ahorro de costes en transporte y mejora de la gestión en las empresas. El proyecto habrá que sacarlo a concurso, pero en este caso también ya hay una firma interesada en llevarlo a cabo.

Antonio Rodríguez considera que ambos proyectos completarán el compromiso del polígono por los servicios. La apertura de la guardería de 61 plazas para los hijos de los trabajadores y la puesta en marcha del wifi gratuito, con cerca de 9.000 entradas mensuales, fueron las primeras apuestas de la asociación. En la cartera de pendientes, quedan dos asuntos importantes. El primero, la adecuación de un aparcamiento para camiones y plataformas en la calle Topacio -ahora hay una explanada, pero no cuenta ni con iluminación- y la colocación de las cámaras de seguridad en el área, pendiente de la aportación económica de la Junta.

Respecto a la ordenación urbana de la zona, los responsables de San Cristóbal reclaman una mejora en las rotondas de acceso y salida del polígono a la nueva Ronda Exterior, que acabe con los atascos que ahora se producen en horas punta. También consideran indispensable la reapertura de la calle Cobre a la que las obras de la circunvalación exterior hicieron desaparecer. En este caso, el Ayuntamiento se ha mostrado receptivo para acometer esta obra.