Villar del Río: Cuatro décadas después la escuela reabre sus puertas

En 1950, un pequeño pueblo de España, el soriano Villar del Río, se prepara para recibir la presunta visita de los americanos en pleno plan de ayuda al desarrollo. Al tiempo que los habitantes de Villar del Río cantaban vestidos de andaluces la popular copla 'Americanos, os recibimos con alegría' en la película Bienvenido, Mister Marshall, a 5.000 metros de altura la Fuerza Aérea Americana fotografiaba el pueblo castellano con la más moderna tecnología fotogramétrica del momento.

La película de Luis García Berlanga dejó frases para el recuerdo en Villar del Río: «Como alcalde vuestro que soy, os debo una explicación, y esa explicación que os debo, os la voy a pagar…». El actual alcalde es Miguel Ángel López. Lleva cuatro años al frente del Ayuntamiento y piensa volver a repetir. Entre los muchos proyectos que este alcalde ha desarrollado se encuentran los homenajes al director de cine, con la proyección de la película que hizo famoso al pueblo, coloquios y charlas en torno a García Berlanga y «hemos inaugurado una estatua también que lleva de nombre 'La espera' que está colocada aquí en el municipio como recordatorio».

Pero el proyecto que más le satisface a Miguel Ángel López es «poder haber recuperado el colegio, tenemos seis niños en la escuela y otro tres que pronto se incorporarán, llevaba cerrada 43 años así que es lo que más feliz me ha hecho en este mandato».

Villar del Río tiene once pedanías y dos despoblados, «y nos parecía muy importante construir un helicésped. Hemos invertido 35.000 euros y si no se utiliza es buena señal porque no habrá habido ningún accidente grave, pero aquí en Tierras Altas no podemos depender de la ambulancia, por lo que creo que es un dinero muy bien utilizado de las arcas municipales».

También le produce una gran alegría al alcalde «haber recuperado la fuente de Ontálvaro, es de agua sulfurosa y entre las cosas que nos quedan pendientes es conseguir comercializar este agua, que estamos en ello; hemos arreglado los accesos». También ha habilitado un aparcamiento para autocaravanas y «hemos solicitado fondos europeos Next Generation para un hotel con hospedaje y comidas en una antigua posada a las afueras. Por aquí pasan cada vez más turistas gracias a la ruta de las Icnitas y el bar que tenemos abierto todo el año se queda pequeño; tampoco pueden dormir aquí y quiero que pernocten».

La recuperación del antiguo lavadero y de la ermita del Humilladero forma parte de un proyecto más ambicioso que está en marcha, que es el Camino del Agua de Villar del Río, de 2 kilómetros de recorrido haciendo parada en cada uno de los puntos señalados relacionados con el agua, «un bien muy apreciado para nosotros».

En cuanto a infraestructuras, «nos hemos propuesto rehabilitar el casco antiguo; en todos los pueblos las nuevas promociones o viviendas se suelen construir a las afueras, yo estoy facilitando que las casas que se hacen, se ubiquen en el centro con unas características estéticas que tienen que cumplir, para que el pueblo de verdad se vea unido y no disgregado».

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