Soria

El maliense ahogado en el Duero sabía nadar

El subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, explica que «el joven sabía nadar, pero en un momento se encontró indispuesto y no pudo subir a la superficie, pero sí que había estado nadando durante unos cuantos metros porque se habían adentrado en el río para disfrutar de su tiempo de ocio. Ocurrió frente a la harinera y la pista de voleiplaya». demás de los GEOS, en el rescate participaron los bomberos de Soria, policía local, y policía nacional.

El joven fallecido es natural de Mali y formaba parte del programa de 'Emergencia Canarias', de las personas en situación irregular que llegan a España, están de manera temporal y se les ofrece una primera atención, en este caso por parte de la Fundación Apip-Acam de Soria gracias a un convenio con el Gobierno. «El grupo fue al río acompañado de una monitora porque es necesario recordar que estas personas no tienen que estar encerradas, pueden moverse con libertad durante el tiempo que están aquí, y desde la fundación se les organiza actividades de todo tipo, también formativas, y por supuesto de ocio».

Hay que recordar que en febrero de 2021 también falleció uno de estos jóvenes, en aquel caso tutelado por Cepaim. Era natural de Chad y se ahogó frente a San Polo debido a un shock por la temperatura del Duero, que estaba a 5 grados. Latorre confirma que «en esta ocasión la temperatura del río era de 20 grados, por lo que habrá que esperar a la autopsia del cadáver para conocer la causa del suceso». Es más, advierte de que este año en España ya se han ahogado 400 personas en ríos, pantanos, playas y piscinas.

Fue en el mes de febrero de 2021, el joven, natural del Chad, se encontraba en torno a las 14:00 horas frente a San Polo con varias personas, algunos de ellos se lanzaron al agua y él no logró salir. Tras varias horas de intensa búsqueda se encontró su cadáver.

El grupo subacuático de los GEO llegó rápido a Soria y permitió comenzar la búsqueda en apenas dos horas. Los especialistas destacaron en su momento que la baja temperatura del agua, 5 grados, y la nula visibilidad dificultaron su trabajo.

El cadáver fue localizado a una profundidad de 2,5 metros y apenas a 25 metros de distancia del lugar donde desapareció. Los especialistas lograron encontrar el cuerpo en una primera inmersión, en hora y media de búsqueda. El cuerpo estaba en el fondo del río y las primeras hipótesis apuntaron a un shock por el frío como la causa de su ahogamiento. «Muchas veces pasa esto con el agua fría a gente joven y venidos de lugares tan cálidos», señalaron los expertos.