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Jueves, 24 de agosto 2023, 14:59
La Guardia Civil detuvo a un hombre, vecino de Zaragoza, que condujo un vehículo bajo los efectos del alcohol en sentido contrario por las autovías A2 y A15 a su paso por Soria y arremetió contra los agentes que intentaron pararlo, según informa Ical.
Los hechos ocurrieron a las 1.45 horas del día 20 de agosto de 2023, cuando por parte del servicio 112 se alertó de la presencia de un turismo que circulaba en sentido contrario al estipulado, por la autovía A-15. Al ser localizado e intentar detener el vehículo, el conductor hizo caso omiso de las órdenes de los componentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, arremetiendo contra ellos y obligándoles a saltar a la cuneta para evitar ser arrollados, continuando su trayecto hacia la autovía A2.
Tras establecer un «complicado» dispositivo al efecto, por parte de varias patrullas de la Comandancia y Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Soria se logró detener el vehículo en el kilómetros 135,000 de la autovía A-2.
Ante la negativa del conductor a abrir las puertas del vehículo, fue necesario fracturar la ventanilla para extraerlo, procediendo a su detención y traslado a dependencias del Destacamento de Tráfico de Arcos de Jalón (Soria) para la instrucción de diligencias. Se le realizó prueba de alcoholemia, con resultado de 0.62 mg/l y 0.63 mg/l de aire espirado.
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Ricardo Sánchez Rico
Por estos hechos, se le imputa dos presuntos delitos contra la seguridad vial, «por conducir con temeridad manifiesta, poniendo en grave peligro la vida o la integridad de las personas» y la «tasa de alcohol en aire espirado superior a la reglamentariamente permitida». El primero puede llevar aparejado una pena de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años; el segundo, pude llevar a una pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
Además, se le imputa otro presunto delito de atentado a agentes de la autoridad, castigado con pena de prisión de 1 a 4 años y multa de 3 a 6 meses; y otro de desobediencia grave a agentes de la autoridad, con pena de tres meses a un año o multa de seis a dieciocho meses. Las diligencias instruidas y el detenido fueron entregados en el Juzgado de Instrucción número 1 de Almazán (Soria).
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