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Primer plano de 'Diego', que tiene 800 hijos después de 45 años de apareamientos. EPA
El semental de Galápagos se jubila

El semental de Galápagos se jubila

'Diego', un ejemplar de tortuga gigante ya centenario, finaliza su larga vida fértil después de salvar a su especie con 800 hijos

Antonio Corbillón

Valladolid

Jueves, 16 de enero 2020, 09:30

La historia de 'Diego' tal vez no sea el mejor ejemplo para confirmar la teoría de la evolución de las especies que Charles Darwin describió tras visitar las islas Galápagos, de la que es originario este ejemplar de tortuga gigante (Chelonoidis hoodensis). Pero su insaciable apetito sexual, a pesar de superar los 100 años, ha permitido salvar de la extinción a uno de los seres que más fascinó al científico británico hace casi dos siglos. Estos días pone fin a casi medio siglo de entrega a sus congéneres, fecundando hembras que han permitido certificar el futuro de las 'hoodensis' «con diferentes escenarios posibles para los próximos cien años», anuncia en la web del Parque Nacional Galápagos y Galápagos Conservancy su director, Washington Tapia.

'Diego' regresó al archipiélago (situado a 1.000 kilómetros de la costa de Ecuador) en 1976 para participar en un programa de salvación de su especie. Vivía plácidamente en un zoológico de San Diego (California) –de ahí su nombre–, donde llevaba varias décadas. Fue reclutado junto a catorce hembras y a otros dos machos para el centro de cría en cautividad situado en la isla de Santa Cruz. Era un intento desesperado de recuperar a una familia endémica de otra isla: Española. En Galápagos, como constató Darwin, cada trazo de tierra ofrece características propias.

Medio siglo de paternidad

'Diego' regresó al archipiélago de Galápagos en 1976 desde un zoo de San Diego (EEUU).

Entonces solo quedaban dos machos más y una docena de hembras de la familia de tortugas gigantes (Chelonoidis hoodensis).

Hoy se ha repoblado su 'patria chica' de la isla Española con 2.000 ejemplares criados en cautividad.

En la vida adulta alcanzan los 80 kilos de peso y cerca de un metro de longitud.

Desde el principio, este macho mostró «una gran personalidad, era bastante agresivo y activo en sus hábitos de apareamiento», explica en Galápagos Conservancy el profesor de Biología Ambiental y Forestal de la Universidad de Siracusa (Nueva York), James P. Gibbs. Casi medio siglo después, los responsables del proyecto aseguran que han nacido 2.000 tortugas que ya han sido reinsertadas en la Española. Los científicos no sabían cuál había sido la contribución de cada uno de los tres machos, pero un análisis genético demostró que mientras uno era prácticamente estéril, 'Diego' es el padre del 40% de las crías.

Son 800 hijos que llevan el código genético de este 'playboy' con caparazón. Esto significa que el otro espécimen habría aportado el 60% restante, aunque se trata de un animal «menos carismático y más reservado», hasta el punto de que no mereció un nombre de pila. Se llama 'E5'. «Tal vez prefería aparearse más por la noche», aventuró el profesor Gibbs. El biólogo americano reconoce que «las jerarquías sociales y las relaciones entre las tortugas gigantes son muy poco conocidas».

La cifra

  • 152 años ha vivido el ejemplar de tortuga galápagos más anciano que se conoce. Biólogos aseguran que en esas islas aún podría quedar alguno de la época en que Charles Darwin viajó allí.

La azarosa vida de 'Diego' ha sido un viaje de ida y vuelta al hogar. Salió de la isla Española en alguna fecha de la primera mitad del siglo XX tras ser capturado en una expedición científica. En un tiempo no muy preciso acabó en el zoológico que le da su nombre, San Diego. Con un cuello muy largo y lleno de arrugas que certifican su edad centenaria, su cara de color amarillo opaco y unos ojillos brillantes, se trata de un ejemplar de 80 kilos de peso que, cuando se pone de pie, alcanza el metro y medio de envergadura. Ahora, cumplida su labor y garantizada la continuidad de sus congéneres, este centenario animal volverá a la Española la próxima primavera. No es que la edad le haya vuelto infértil. «Diego está en un buen estado de salud», asegura el director del Parque Nacional Galápagos, Jorge Carrión.

Consanguinidad

Aunque vive con otras seis hembras que han sido sus concubinas en este largo proceso de reproducciones, los gestores del plan quieren evitar que siga mostrando sus dotes de semental. «Sería negativo si todas las tortugas fueran descendientes de este gran reproductor», incide Carrión en su informe final.

En unas semanas, 'Diego' volverá a la isla de la que salió hace al menos 80 años para vivir el resto de sus días. Española es un roquedal seco y árido. Una de las más pequeñas (60 kilómetros cuadrados), pero la más antigua de Galápagos. Se calcula que en su superficie vivieron unos 5.000 ejemplares de 'Chelonoidis hoodensis'. Llegaron al borde de la extinción porque el fácil acceso a este trozo de tierra permitió que balleneros, piratas y pescadores les dieran caza sin piedad.

La introducción de cabras salvajes provocó que devoraran todo el hábitat alimenticio de estos reptiles marinos, en especial los cactus. De hecho, el programa de reintegración de los hijos de 'Diego' va acompañado de la restauración ecológica del lugar.

En este conjunto isleño de 22 islas y otros 107 islotes llegaron a vivir unos 400.000 ejemplares de quince especies originales de tortugas. El ardor sexual de 'Diego' permitirá que una de las más características por su tamaño vuelva a ser la reina de la Española.

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