Secciones
Servicios
Destacamos
«Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto». Es una de las frases más conocidas de los Evangelios, ligada a la historia de la resurrección de Lázaro. Y es Marta hermana de María y de Lázaro. Vivía en Betania, pequeña población distante unos cuatro kilómetros de Jerusalén y cerca del Monte de los Olivos. Jesús acostumbraba hospedarse en la casa de estos tres discípulos. Marta se esforzó en servirle lo mejor que pudo y, más tarde, solicitó con fuerza a Jesús que devolviera al vida al cadáver de su hermano.
La Iglesia católica la reconoce como santa y para los católicos es patrona de cocineras, sirvientas, amas de casa, hoteleros, casas de huéspedes, lavanderas, de las hermanas de la caridad, del hogar. Todas son asociadas con su papel en las historias de la Biblia, donde se la muestra como una mujer servicial y de carácter fuerte.
A Santa Marta recurren los fieles para pedir su protección y ayuda en medio de las urgencias y dificultades más grandes, ya que fue ella la que pidió a Jesús obrar el milagro de la resurrección de su hermano Lázaro.
Este 29 de julio es una jornada en la que es santoral recuerda también a San Olav de Noruega. Siendo rey de su pueblo, Olav propagó fe cristiana que había conocido en Inglaterra, pero finalmente, atacado por sus enemigos, murió asesinado en Nídaros, hoy ciudad noruega de Trondheim.
San Calínico de Gangra
San Félix de Roma
San Guillermo Pinchón
San Lupo de Troyes
San Próspero de Orleans
Santa Serafina de Galicia
Beato Urbano II papa
Beatos Lucio Martínez Mancebo y compañeros
Beato José de Calasanz Marqués
El día de la celebración de los santos tiene sus inicios en tierras españolas gracias a la tradición cristiana que se instauró hace siglos en España. ¿Pero qué significa, en realidad, celebrar el santo? El catolicismo ha cogido cada uno de los días del año para recordar (conmemorar) a aquellos cristianos ilustres que, además, sufrieron tormentos, en muchas ocasiones de aquellos que repudiaban la fe católica.
Existe una palabra asociada a la felicitación del santo. Se trata de la palabra «onomástica», que se refiere al día en el que según el santoral católico es la festividad del santo de la persona con ese nombre. Es común referirse también al cumpleaños de una persona como onomástica, aunque no son palabras sinónimas. Esto sucede porque era tradición poner a las personas el nombre del santo correspondiente al día en el que habían nacido. De esta manera, santo y cumpleaños coincidían en una única fecha, llamada comúnmente onomástica.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.