Así se puede prevenir la principal causa de la muerte en España

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de mortalidad (seguidas de cerca de los tumores) y la segunda de hospitalización en España. En el año 2019 fueron la causa de la defunción de más de dos millones de personas en la Unión Europea, según datos del Ministerio de Sanidad. Evitar los principales factores de riesgo puede evitar tres de cada cuatro enfermedades cardiovasculares.

Entre los factores de riesgo más importantes se encuentran el tabaco, la hipertensión, la hipercolesterolemia, la diabetes mellitus y el sobrepeso y la obesidad. Además, estados emocionales como la depresión, la ansiedad, el enojo y la hostilidad, y el estrés (agudo, crónico) son factores que aumentan la probabilidad de padecer una enfermedad cardiovascular.

Una dieta hipercalórica y con altos contenidos en grasas saturadas, azúcar y sal puede provocar la aparición y desarrollo de enfermedades que se consideran factores de riesgo cardiovascular, como la diabetes, la hipertensión arterial, la dislipemia y la obesidad. En España, en 2020 el 28,8% de las mujeres y el 36,1% de los hombres declararon no consumir diariamente fruta fresca y el 48,1% de las mujeres y el 59,1% de los hombres, tampoco consumen diariamente verduras, ensaladas u hortalizas.

el 35,3% de la población española de entre 15 y 69 años no alcanza el nivel de actividad física saludable recomendado por la OMS ni la recomendación del Ministerio de Sanidad. Esto contribuye al desarrollo de otros factores de riesgo como los altos niveles de colesterol, laobesidad, la diabetes y la hipertensión. Así, a menor actividad física, mayor probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular. Reducir el sedentarismo produce beneficios, la mayoría de ellos compartidos y sinérgicos con el incremento de la actividad física, como la reducción del riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular y diabetes mellitus tipo 2 y la protección frente a varios factores de riesgo como la HTA o la obesidad.

El tabaquismo es la principal causa de morbimortalidad cardiovascular prematura, estimándose que entre el 21,8% y el 30,3% de las muertes atribuibles al tabaco fueron causadas por enfermedades cardiovasculares. El tabaco causó en España en el año 2017 53.825 muertes en la población de 35 y más años, lo que representaba el 12,9% de la mortalidad total. Así, el consumo activo de tabaco se sitúa como una de las primeras causas evitables de mortalidad y origina un elevado coste sanitario y social.

El consumo de alcohol ha sido asociado en el pasado con algunos beneficios en la salud cardiovascular. De este modo se atribuye al consumo «moderado» de alcohol la reducción del riesgo de mortalidad cardiovascular o de infarto agudo de miocardio. probablemente debido a su capacidad de elevar los niveles de HDL-colesterol y al contenido en polifenoles de ciertos tipos de bebidas obtenidas porfermentación. Sin embargo, estos estudios tienen sesgos significativos, y ahora se sabe que el posible beneficio cardiovascular derivado del consumo de alcohol es insuficiente para compensar la mortalidad por el conjunto de las otras causas asociadas a su consumo, incluso cardiovasculares.

Los efectos nocivos del alcohol sobre múltiples aspectos de la salud, tanto en la salud cardiovascular como no cardiovascular (cáncer, daño hepático, pancreático o desnutrición) superan largamente a los hipotéticos beneficios. Así, el posible beneficio cardiovascular derivado del consumo de alcohol es insuficiente para compensar la mortalidad por el conjunto de otras causas y, por tanto, debe ser considerado un factor de riesgo. De hecho, es la primera causa de mortalidad atribuible en el mundo en población de edad entre 25 y 49 años (117). El alcohol esla sustancia psicoactiva más consumida en España y con menor percepción de riesgo.

Las mujeres con enfermedad cardiovascular suelen estar infradiagnosticadas e infratratadas. «En muchas ocasiones, la mujer que consulta por dolor en el pecho es diagnosticada de ansiedad o de estrés, en lugar de angina de pecho, lo que puede derivar en un futuro infarto de miocardio evitable», señala la Estrategia de Salud Cardiovascular del Ministerio de Sanidad. El informe destaca que el dolor torácico es el síntoma principal en ambos géneros (alrededor del 80%), si bien las mujeres tienen más síntomas adicionales como son náuseas, vómitos o mareos, circunstancia que puede interpretarse como una sintomatología distinta en mujeres respecto de hombres y condicionar dicho diagnostico. «Algunos estudios han mostrado que se acostumbra a identificar correctamente a más hombres que mujeres su problema cardíaco en el momento de la atención», sentencia el documento. Con frecuencia las mujeres reciben menos, o más tarde, el tratamienton necesario, por lo que es muy importante estar atentos a esos síntomas.

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