Así le roban su casa

¿Cuánto tarda un ladrón en superar la puerta blindada de su hogar? En términos generales «unos diez segundos». Hay algunos, los más expertos, que puede llegar a los «siete, ocho segundos». Por encima de los diez segundos, solo los más inexpertos.

Diez segundos para entrar y un máximo de «tres o cuatro minutos» para recorrer la vivienda y hacerse con todo lo que tenga valor. «En menos de cinco minutos un ladrón con cierta habilidad entra y sale de una vivienda que su propietario ha dejado aparentemente segura», sentencia el leonés Jesús Díaz, perito judicial y cerrajero forense.

El problema, advierte, se encuentra en la fragilidad de las cerraduras que existen en la mayoría de los pisos de las ciudades.

Se trata de cerraduras viejas que se unen a la falta de una mentalidad preventiva y a un mal endémico como el intrusismo en el propio sector de la ferretería. «Todo facilita el camino a los ladrones. Pensamos que la cerradura lleva toda la vida, que es segura y que sirve lo mismo que lo hacía hace diez o quince años. Y para nada es así», recuerda Jesús Díaz.

En los últimos días varias comunidades de vecinos de León han lanzado la voz de alarma al localizar signos sospechosos tanto en los telefonillos como en los rellanos de las viviendas, evidenciando que están siendo rastreadas por los ladrones.

Ese es el primer paso. «El ladrón recorre del noveno al primero y va limpiando todo lo que sale a su paso. Antes ha reconocido la zona y sabe lo que se va a encontrar», añade. Más de una treintena de signos sirven para dejar mensajes como 'como mujer sola', 'no insistir', 'están fuera los domingos', 'usar palanca' o 'abren con cadena'.

Primero las marcas, y después el robo. «Siempre ocurre así y eso que la policía hace un gran trabajo», asegura. Jesús Díaz insiste en que hoy el abanico de opciones para asegurar una puerta es notable y con soluciones a la altura de los ladrones a los que se tendrá que enfrentar.

«La mejor prevención para una vivienda es una buena cerradura, que impida el paso a los ladrones y garantice la seguridad de quien vive en el interior», sentencia.

Y ante la más mínima sospecha por un símbolo desconocido: «Lo obligado es dar aviso a la policía».