Las recomendaciones de la OCU para elegir el mejor equipaje de cabina

1- Hay que tener en cuenta lo que se quiere transportar y cómo: la opción más básica es una bolsa con ruedas, que sirve para transportar cosas que no exijan mucha protección, aunque también existen otras opciones para transportarlo como son las mochilas, las bolsas semirrigidas con bolsillos exteriores, la maleta rígida o el maletín.

2- Comprobar el tamaño para evitar costes extras: existen dos medidas de referencia que son las más comunes: 55 x 40 x 20 (Ryanair y Vueling) y 55 x 35 x 25 (Air France, Alitalia, Air Europa)

3- El peso: los 10 kilos admitidos por Air Europa, Norwegian, Finnair, Vueling y Ryanair (desde enero 2018 Ryanair en principio solo permite llevar la maleta en cabina pagando el 'embarque prioritario'), aumentan hasta 12 kilos en Air France. No obstante hay otras compañias como Swiss Air, Alitalia, Turkish y Lufthansa que permiten 8 kilos y otras que permiten aún menos como es el caso de Emirates y Qatar, solo 7 kilos.

4- El material: las maletas que menos pesan son las textiles, y entre las rígidas, el policarbonato es el material de plástico más ligero y sensible. Además, estas suelen llevar cierres de cremalleras que ñade algo de profundidad y volumen interno, aunque si se abre la expansión, puede que ya no se cumplan las medidas permitidas en cabina.

5- Con doble barra y asa telescópica: la doble barra debe de estar bien fijada con tornillos, que el agarre sea cómodo y el plástico resistente. La empuñadura de doble barra tradicional con asa telescópica es la mejor solución y la más cómoda para la maleta. La barra única es más incómoda ya que la maleta se puede balancear.

6- Las ruedas: El trolley tradicional tiene dos ruedas fijas. El spinner tiene 4 ruedas giratorias, lo que les permite cambiar de dirección. Y el spinner doble tiene 8 ruedas, dos en cada esquina, lo que hace es que cuando se tire de él sea más estable en superficies irregulares que el spinner sencillo. Se deben de evitar las ruedas con revestimiento de goma, se desgastan muy rápido.

7- Los detalles: Cualquier maleta tiene facilidad de romperse, pero es importante que se puedan arreglar los elementos vitales como las asas, los cierres o las ruedas. Algunas tienen un forro interno que se puede abrir y cerrar, pensado para poder acceder a las ruedas y al asa en el caso de que se necesite acceder a ellos para arreglarlo.

8- El cierre: la cremallera es el elemento más utilizado de la maleta, pero es fácil forzarlo, aunque tenga candado o cierre de combinación; los pestillos o las cremalleras reforzadas aportan algo más de firmeza.