Los amigos de Samuel, el joven fallecido por una brutal paliza en La Coruña, en Galicia, han explicado cómo se produjeron los hechos en la fatídica madrugada del sábado, según publica 'El Correo'. El joven y una amiga estaban haciendo una videollamada con otra ... chica para decirle dónde estaban cuando, en un momento determinado, un chico que pasaba por detrás les dijo que dejaran de grabar. «Intentamos explicarle que estaba confundido, que estábamos haciendo una videollamada y enseñándole la zona donde estábamos a una amiga», dice Lina. Hasta su amiga Vanessa, que estaba en línea en la videollamada, tuvo que alzar la voz para decirle al agresor que se estaba confundiendo. Nada de eso sirvió para calmar los ánimos. «El chico quería pelea y nos tocó a nosotros», lamenta Lina.
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El agresor fue directo a por Samuel y le espetó: «O paras de grabar o te mato, maricón». A la víctima no le dio tiempo ni a contestar. «Maricón de qué». Ahí se quedó su frase. Y acto seguido empezó a recibir golpes. Su amiga Lina intentó mediar en la agresión y también una chica que acompañaba al agresor, si bien -como explica Lina- «no hizo nada. Incluso me dijo que me apartara, que no pintaba nada ahí».
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En el trancurso de la agresión apareció «un chico de color que se encontraba en la zona y logró apartar al agresor». Samuel estaba algo desorientado por los golpes recibidos, así que le pidió a Lina que entrase de nuevo en el pub para que le cogiera el móvil. Para cuando salió a la calle su amigo ya no estaba. En ese momento vio a un grupo de jóvenes a la carrera hacia una plaza. Ella se temió lo peor y fue a esa zona. «Escuché que alguien gritaba maricón de mierda», relata. Cuando llegó al lugar, encontró a Samuel en el suelo inconsciente y los agresores ya no estaban. No pudo hacer nada por su amigo. «No pensaba. Lo único que decía era auxilio. Ahora lo pienso todo y ese chico quería una pelea con alguien y nos tocó a nosotros», lamenta.
Testigos de la brutal agresión aseguran que había unas diez personas que rodeaban a Samuel, quien recibió patadas y puñetazos por todo el cuerpo al grito de «maricón de mierda».
Políticos, asociaciones LGTBI y ciudadanos se han concentrado este lunes al mediodía en la Praza de María Pita de La Coruña para condenar la paliza que en la madrugada del sábado acabó con la vida del joven Samuel. Los asistentes al acto han guardado un respetuoso minuto de silencio para, a continuación, realizar otro minuto de aplausos ante la emoción de los presentes.
Entre los asistentes, una joven visiblemente conmocionada por el suceso explicaba que se encontraba «en shock» por lo que ha ocurrido. «Es increíble que en una ciudad como La Coruña pasen esas cosas. Piensas que la sociedad va avanzando y de repente te encuentras que queda mucho por hacer», ha dicho la joven.
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