Estos son los motivos por los que vibra el volante del coche

Los principales motivos detrás de la vibración del volante son:

• Desgaste irregular de los neumáticos: Se puede percibir si el volante vibra a baja velocidad y va aumentando a medida que se acelera. Para ello, se deberá cambiar las gomas cuanto antes. También suele ocurrir cuando no se ha usado el coche en mucho tiempo, lo que ha provocado que los neumáticos se deformen.

• Pérdida de equilibrado: Si el volante vibra a alta velocidad o en un rango específico (dejando de vibrar a mayor o menor velocidad), lo más seguro es que se deba a que los neumáticos no están correctamente equilibrados. En este caso, se deberá pasar por el taller para que se lleve a cabo un equilibrado correcto.

• Problemas con la dirección: El volante se conecta al resto del coche por medio de la dirección. Si esta no se encuentra alineada correctamente, se pueden producir vibraciones. Se deberá acudir a un taller para que se revisen y ajusten los elementos.

• Discos de freno deformados: Si el volante vibra al pisar el freno, hay posibilidades de que el origen sean los discos de frenos. Pueden estar deformados, por lo que transmiten al volante las vibraciones cuando se pisa el pedal. Una solución adecuada puede ser cambiar los discos de freno por otros planos. También es recomendable cambiar las pastillas de freno.

• Holgura en 'silentblocks': Estas piezas de goma se colocan en determinadas zonas para reducir el ruido y las vibraciones. Sin embargo, cuando estas piezas presentan alguna holgura, se produce vibración en el volante. Es necesario cambiar los 'silentblocks' deteriorados de inmediato, ya que esta pieza afecta a la seguridad del vehículo.

• Amortiguación deteriorada: Si las vibraciones en el volante se deben a un desgaste de los neumáticos o a holguras en los 'silentblocks', puede que también haya problemas en los amortiguadores. Será necesario entonces revisar la amortiguación y cambiarla si se detectan problemas.