Consulta la portada del periódico en papel
Fructuoso Prieto, gerente de la vinoteca 'El buen gusto vinos' en la tienda de Parquesol. Rodrigo Ucero
La bodega de El Norte

La medida justa de vino en cada copa

¿Hasta dónde deben llenarse las copas cuando servimos cada tipo de vino? La respuesta atiende a razones de calidad del producto, económicas y estéticas

Beatriz A. Casares

Valladolid

Viernes, 9 de agosto 2024, 20:12

En tierra de vinos es importante tener unas nociones básicas sobre cómo elegir y servir un vino, aunque no sea fundamental aplicarlas en todo momento. La cantidad que se debe servir en una copa es importante para que el vino no se caliente y «se abra», pudiendo así disfrutar de sus propiedades. Pero también responde a motivos estéticos, económicos y, en muchos casos prácticos, como la cantidad de vino que tenemos y las copas en las que queremos repartirlo.

Publicidad

La media «depende un poco de los vinos», afirma Fructuoso Prieto, gerente de la vinoteca 'El buen gusto vinos' de Valladolid, a quien hemos vuelto a pedir consejo sobre estos menesteres. «La burbuja, el champán, el cava… El espumoso, en general, siempre aconsejamos que sirvamos lo que se va a beber para que no se caliente en la copa. El tinto se puede servir un poco más», sentencia.

¿Con una botella de vino cuantas copas podemos llenar?

Aunque alguna vez nos apetece llenar la copa hasta el borde para ahogar las penas o celebrar alguna victoria, para hacernos una idea de la cantidad adecuada podemos tener en cuenta que «una botella, son seis o siete copas de vino».

Botellas de vino en la vinoteca 'El buen gusto vinos' de Valladolid. Rodigo Ucero

Esta cantidad, que es aproximadamente un tercio de la copa, sirve para que «para que se oxigene, se abra el vino y se aprecie bien la calidad». Además, responde a una cuestión estética de cómo se ve el líquido en el recipiente, quedaría tosco llenar una copa del todo y no sería práctico a la hora de beberla.

¿Qué cantidad es la adecuada para probar un vino?

Al elegir una botella de vino en un restaurante es común que el camarero sirve una pequeña cantidad en una copa para que uno de los comensales juzgue si está de acuerdo con la calidad de la bebida. «Un dedo es más que suficiente para probarlo, es más, solo con olerlo se sabe que no tiene defecto. Con olerlo nos valdría», afirma Fructuoso, que realiza una demostración de cómo se serviría una copa de vino. Curiosamente, ha decidido usar un Coravin, un sistema que penetra en el corcho, hace que se expanda y luego se vuelve a cerrar. De esta forma, la botella aguanta tres cuatro meses.

Publicidad

Y la semana que viene

Al viajar es usual querer probar cosas nuevas y sobre todo comida y bebida de la zona en la que estamos. Pero… ¿Cómo elegimos un vino cuando salimos de nuestra zona de confort? ¿Qué indicaciones podemos darles a los camareros para mostrarles nuestros gustos? La sumiller Marta Barrigón nos ayuda a dar con la clave para encontrar los mejores vinos de cada lugar.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad