Samuel García Pascual | Director general de Tecnología y Personas

«La Inteligencia Artificial es una oportunidad de vivir una revolución»

La Inteligencia Artificial está cada vez más presente en nuestras vidas. También en el mundo de la empresa, en el que cada vez son más quienes apuestan por ello, pese a algunas reticencias. Su evolución, su presente y su futuro serán analizados mañana viernes, día 10, en el foro de Inteligencia Artificial que organiza El Norte de Castilla y que cuenta con el patrocinio de CaixaBank y de Tecnología y Personas.

Samuel García Pascual, director general de la consultora, intervendrá en una mesa redonda en la que se hablará de esta 'moda', como él mismo tilda el actual momento, así como de «la inquietud y de la incertidumbre» que rodea a actualmente a la IA. Frente a las aplicaciones que los usuarios encuentran a la hora de crear vídeos o textos, y aunque «diariamente recibimos muchos impactos de nuevas aplicaciones y nos encontramos en un momento imaginativo respecto a dónde puede llegar, todavía falta conocimiento sobre la aplicabilidad que puede tener en el mundo de la empresa», considera este experto que, no obstante, anima (así lo hará con su intervención) «a profundizar y a optimizarla para que la productividad sea mayor».

Ciertamente, en función de las necesidades que tenga cada empresa, la inmersión puede variar. Es interés de muchos adentrarse en esta tecnología, aunque en la actualidad, en ocasiones hay dos barreras referentes a los costes, a las que se hace alusión García Pascual: «Por un lado, está el coste de los expertos, que todavía es alto y que se ajustará, porque mucha gente se está formando en la materia; y, por otro, está el de la máquina, que todavía es caro pero, cuando lleguemos a grandes volúmenes de infraestructuras, también se reducirá, y no será a largo plazo, sino antes». Merced a esta democratización desde el punto de vista económico, que se espera que se produzca en los próximos años, las empresas podrán adentrarse en un mundo nuevo, casi inimaginado hasta hace poco, más allá de las distopías que las películas y series de ciencia ficción podían vislumbrar como eso, ficción.

«La potencialidad que tiene la Inteligencia Artificial es increíble y la imaginación nos lleva a un montón de sitios de las cosas que se pueden hacer. La IA va a cambiar el mundo», advierte el CEO de Tecnología y Personas, que deja claro, en cualquier caso, que es necesario «cultivar una cultura ética y hacer una legislación acorde» al reto que supone, puesto que «la Inteligencia Artificial va a cambiar la manera de trabajar y de interactuar en los próximos cinco o diez años».

Hablando de ficción, muchas veces esta ha llevado al imaginario colectivo a sitios que no tendrían por qué darse, muchas veces, relacionados con una situación de poder descontrolado por parte de la IA. Aunque «estamos perdiendo un poco el miedo al uso, porque vemos que es algo real y que no está tan lejos en el tiempo», en paralelo se mantiene esa sensación de que puede existir «un futuro dramático que mucha gente está dibujando». «Creo que seremos capaces de gestionar la evolución de la IA de tal manera que nunca llegará a darse ese escenario», asevera Samuel García Pascual, quien percibe que el miedo no es tanto a utilizarla como «a que se pueda ir de las manos y acabe descontrolada».

De hecho, el interés empieza a ser generalizado, a pesar de esas incertidumbres de algunos; cada vez son más los que piden la asesoría de Tecnología y Personas para adentrarse en esta tecnología. «El interés es creciente. Los que preguntan, saben que pueden hacer algo con esto, pero no cómo pueden usarlo. Nuestro trabajo es convertir ese interés en algo pragmático y que la empresa pueda aprovechar, pero todos tienen claro, en los proyectos que nos solicitan, que quieren tener algo de Inteligencia Artificial, aunque no sepan exactamente qué es lo que pueden hacer con ella», explica el CEO.

No en vano, la concienciación respecto a las posibilidades que ofrece es creciente, aunque deba haber una mayor, en opinión de Samuel García Pascual, dado que «la tecnología va muy por delante de cómo se está preparando la sociedad». «Necesitamos prepararnos culturalmente para aceptar lo que viene, además de profesionalmente. El trabajo debe ir acompañado de una mayor legislación; acaba de salir algo a nivel europeo, pero queda mucho», indica quien cree que «la IA se puede ver como una oportunidad o como una amenaza», pero opta por verlo «como una oportunidad de una revolución industrial y social muy positiva si somos capaces de hacerla bien».

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