No todos los etiquetados ecológicos del papel higiénico son igual de fiables, según la OCU

La mayoría del papel higiénico que hay en el mercado proviene de bosques gestionados de forma sostenible. De hecho, algo más del 70% de los paquetes de papel higiénico analizados por OCU tenían un certificado ambiental que así lo demuestra. Sin embargo, no todos los certificados son iguales ni todos los rollos de papel higiénico tienen la misma calidad, según indica el organismo.

Según la OCU, los fabricantes aprovechan la creciente preocupación por el medio e incluyen en sus productos alegaciones ecológicas de algún tipo, pero «no todas son igual de fiables». La Organización de Consumidores indica que, en el caso del papel higiénico y productos derivados del papel, destacan tres certificados que identifican los productos que son realmente ecológicos en algún aspecto:

Certificado FSC: Es el sello ecológico más extendido. Lo emite un organismo independiente y certifica que la madera procede de bosques con una gestión forestal ambientalmente apropiada, socialmente beneficiosa y económicamente viable de los bosques de todo el mundo. El papel higiénico con sello FSC Mixto, se compone de una mezcla de fibras que provienen de bosques certificados FSC, de fibras recicladas o de madera controlada en origen.

Certificado PEFC: Es el sello impulsado desde la propia industria forestal y certifica que la madera procede de bosques gestionados sosteniblemente de origen local.

Ecolabel o ecoetiqueta europea: Es el sello que ofrece mayores garantías para el consumidor pero es difícil de encontrar, sólo cuatro de los papeles de baño analizados cumplían con sus requisitos. La Ecolabel garantiza una baja contaminación del aire y de agua durante la producción, la no inclusión de una serie sustancias peligrosas y el uso de fibras recicladas.

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La OCU afirma que un papel higiénico ecológico debe reunir estas características: cumplir con criterios de producción sostenibles, contener un alto porcentaje de fibras recicladas, no debe usar blanqueantes innecesarios ni utilizar tintes dañinos, disgregarse rápidamente en el agua, contar con un embalaje de papel o hecho con plásticos reciclados e incluir unas instrucciones de reciclaje adecuadas.

En cuanto a la calidad, la OCU explica que a la hora de comprar papel higiénico es importante saber que su absorción, resistencia, suavidad y facilidad de uso son buenas.

«Los rollos de papel higiénico de tres o más capas son los que obtienen mejores valoraciones. Los rollos de cuatro capas tienen una cantidad de papel muy similar a la de los compactos de dos capas, pero tienen menos metros de papel. Cuando hay niños en casa es preferible elegir un papel de baño de dos capas, ya que los pequeños tienden a malgastar mucho papel. En la medida de lo posible, utiliza solo el papel necesario, evitarás desperdiciar hasta un 20% de producto», recomienda el organismo.