La elevada multa por no llevar la pegatina de la ITV

La pegatina de la ITV es un elemento más del vehículo. De forma rectangular, de un solo color y colocada en una esquina del parabrisas. De un solo vistazo permite conocer la última inspección técnica del vehículo. Los turismos que tengan una edad entre cuatro y diez años de antigüedad, deberán pasar esta inspección cada dos. Los turismos que no lleguen a los cuatro años están exentos de pasar la ITV y si tienen una década de antigüedad, la ITV será obligatoria cada año.

No llevarla o colocarla en una zona que dificulte la visibilidad del conductor supone una multa económica que para muchos es excesiva. El Reglamento General de Vehículos establece que la pegatina debe colocarse en el ángulo superior derecho del parabrisas, desde la perspectiva del conductor en el interior del habitáculo. Esta zona se considera el lugar que menos afecta a la visibilidad del conductor. Pero, ¿qué pasa si no se lleva puesta?

Su uso es obligatorio, ya que con un simple vistazo se ve que el vehículo ha pasado la revisión técnica. No tenerla instalada en el parabrisas conlleva una multa que oscila entre los 80 y 100 euros. Una sanción desproporcionada para algunos conductores que han alzado la voz para reclamar que la Administración posee información acerca del vehículo sin la necesidad de tener la pegatina.

El parabrisas solo puede lucir la pegatina de la última inspección técnica, la colección de pegatinas podría dificultar la visibilidad del conductor, afectando a su capacidad de reacción. Otros adhesivos que están permitidos son: el distintivo medioambiental de la DGT, sistema de Telepeaje, identificadores nacionales, la L de conductor novel. Sin embargo, no está permitido instalar reflectantes o luminiscentes y pegatinas de competición.

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