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Dedicó un mes entero a vaciar la casa de sus vecinos. Poco a poco, fue guardando en su garaje todo lo que les quitaba, un día las vajillas, otro las herramientas, más tarde un casco, aparatos electrónicos, botellas o remolques. Y, de paso, ... les taló los árboles del jardín. El 'pastel' se descubrió en cuanto las víctimas regresaron a la casa, una segunda residencia en la localidad cántabra de Arenas de Iguña. La verdad se descubrió enseguida, porque la Guardia Civil vio que el garaje pegado a la casa desvalijada estaba lleno de objetos de lo más dispar. Tal garaje es de A.M.G., de 48 años de edad y vecino del mismo lugar, que fue detenido como presunto autor de un delito de robo con fuerza en interior de vivienda y otro de daños en la casa de sus vecinos.
Fue el pasado día 29 de octubre cuando dos personas alertaron a la Guardia Civil sobre un presunto robo en su segunda vivienda. Personada una patrulla en el lugar, se entrevistaron con los llamantes quienes narraron cómo, cuando habían regresado al domicilio tras una ausencia de un mes, encontraron tanto la cerradura de la puerta como la del garaje forzadas, tal y como cuenta El Diario Montañés. Notaron además diversos daños en su jardín, consistentes en la tala de varios árboles.
Una vez en el interior de la casa pudieron comprobar que la habían desvalijado, robando una gran cantidad de objetos distribuidos por toda la vivienda y el garaje. Bienes tan dispares como un televisor, un casco de moto, una cubertería de plata en su estuche, un juego de té, el motor y remolque de una zodiac, una mini cadena, una videoconsola, una aspiradora, un enfriador de botellas, una botella de champán grande, herramientas variadas y un machete, entre otros.
En ese momento los agentes comenzaron una inspección ocular de la vivienda, de su jardín y de sus inmediaciones. Se trata de una casa dividida en dos alturas, siendo el primer piso donde se perpetraron los hechos.
Cuando los guardias inspeccionaron el jardín, observaron en el interior de un garaje contiguo que se encontraba en ese momento abierto una gran cantidad de objetos y alguno coincidía con los sustraídos. Los denunciantes reconocieron sin lugar a dudas aquellos objetos como de su propiedad, y mencionaron que dicho garaje es propiedad de un hombre que reside en la planta inferior.
Más tarde llegó al lugar el ahora detenido conduciendo un vehículo. La patrulla en ese momento le preguntó por los objetos que almacenaba en su garaje, «a lo que no tiene una respuesta coherente», cuenta la Guardia Civil. Inmediatamente se inspeccionó el vehículo, en el que se encontraron dos grandes estuches, uno con una cubertería de plata y otro con un juego de té, ambos denunciados como robados por sus vecinos.
Como resultado de las investigaciones, se llega determinar que el supuesto autor de los hechos, había aprovechado la ausencia de sus vecinos, para a lo largo de un mes entrar en su domicilio e ir sustrayendo diferentes objetos, algunos de los cuales ya han sido recuperados y entregados a sus legítimos dueños.
Por estos motivos, la Guardia Civil detuvo a A.M.G. como presunto autor de un delito de robo con fuerza en interior de vivienda y otro de daños.
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