Rodrigo Cabezudo, cofrade vallisoletano
«En Valladolid nos preocupamos más de promocionar la Semana Santa fuera que dentro»Rodrigo Cabezudo, cofrade vallisoletano
«En Valladolid nos preocupamos más de promocionar la Semana Santa fuera que dentro»La devoción de ser cofrade y vivir la Semana Santa con fervor en Valladolid y la creatividad del diseño gráfico de manera autodidacta. Dos pasiones que se unen, coinciden y lucen sus mejores galas en las ilustraciones y carteles de Rodrigo Cabezudo, cofrade desde ... los seis años de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo. El joven confiesa que la unión de sus dos devociones se produjo a partir de su entrada al Grado de Publicidad y Relaciones Públicas: «Tuve varias asignaturas dedicadas al diseño, pero el aprendizaje ha sido muy autodidacta. Empezaron a encargarme carteles y diseños para las cofradías de Valladolid y desde entonces hasta ahora». En la actualidad, el joven de 24 años ha diseñado carteles e ilustraciones para cofradías y eventos de toda España, entre los que destacan, como no puede ser de otra manera, los de Valladolid que se unen a Sevilla, Granada o Murcia entre otros.
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«El primer cartel que me encargaron fue para la Romería del Carmen de Extramuros. A partir de ahí empezaron el resto de diseños. En ese mismo momento también formaba parte del comité que organizaba el Encuentro Nacional de Jóvenes Cofrades de toda España, que se celebró en Valladolid en 2021, y en ese comité diseñé el cartel del evento y tuvo repercusión a nivel nacional», recuerda con especial nostalgia Rodrigo Cabezudo.
Entre sus sueños más cercanos ronda la idea de convertirse en el próximo autor del cartel de la Semana Santa Vallisoletana: «Es un sueño que me lleva rondando un tiempo. Siempre habíamos tenido unos carteles muy básicos con fotografías muy simples pero este año se han atrevido con algo más actual y me encantaría ser el próximo en diseñarlo continuando con ese estilo», confiesa Rodrigo Cabezudo, que también pertenece a dos cofradías de Gloria, la Banda del Carmen de Extramuros y de la Patrona de Valladolid.
Su estilo es definido por él mismo como «bastante conceptual» y el proceso de creación es meramente digital. «Las ilustraciones las creo a través del ordenador. Primeramente suele llegarme una idea a la cabeza y después hago un boceto en papel muy básico y en el ordenador lo voy plasmando. El proceso es similar a cuando alguien dibuja o pinta algo, solo que demanera digital, también utilizo diferentes pinceles y texturas», explica el cofrade en relación al desarrollo de sus obras artísticas. «Lo que me gusta, cuando hago carteles, es conseguir llamar la atención del espectador, que capte el mensaje a simple vista, pero que luego se detenga profundizando en los detalles, que suelen ser muchos y que, a simple vista, no se aprecian. Procuro buscar siempre un sentido cromático y estético, acorde al momento o al objetivo de cada una de ellas», puntualiza.
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Uno de los carteles que Rodrigo Cabezudo guarda con más cariño y sentimiento es el realizado para la Romería del Carmen de Extramuros —con el que posa en la fotografía—. «En él quise rendir un homenaje a todos nuestros mayores, en especial a los devotos y cofrades del Carmen de Extramuros que, en esos duros años, se marcharon de este mundo sin poder volver a ver a la Morena por la campiña un nuevo Lunes de Pentecostés. En este cartel, la imagen de la Virgen se funde en una fotografía antigua de los cofrades que la llevaban, simbolizando que fueron ellos, y las generaciones anteriores y posteriores los que nos han legado el gran tesoro de la devoción a la Virgen del Carmen de Extramuros, la cual aparece orlada con todos los vítores que sus devotos le dicen cada vez que procesiona por la pradera en su Romería», describe.
El primer cartel que el joven vallisoletano realizó para una cofradía fuera de su ciudad fue el año pasado para la Hermandad de Nuestra Señora de la Alegría de Sevilla. «Posteriormente recibí el encargo de la Cofradía de la Humildad de Granada, que confió en mí para realizar el cartel de la salida extraordinaria del Señor con motivo del XXXIV Encuentro Nacional de Cofradías, celebrado en la ciudad de la Alhambra. En este cartel busqué representar tanto a la ciudad de Granada como a las diferentes regiones de España que nos íbamos a dar cita en aquel encuentro nacional, todo en torno a la impresionante imagen del titular de la Hermandad. Por último, en este 2024, he sido el cartelista de otra cofradía granadina, la del Resucitado y la Virgen de la Alegría, para quienes he realizado un cartel lleno de simbolismo y con una inspiración diferente a todos los anteriores, pues sigue el estilo constructivista, emulando una característica obra del arte de la Revolución Rusa», señala Cabezudo.
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La Semana Santa Vallisoletana
«En Valladolid nos preocupamos más de promocionar nuestra Semana Santa fuera que dentro. Entre los propios vallisoletanos hay mucho desconocimiento sobre este tema. Siendo una Semana Santa muy importante nos hemos quedado descafeinados. La promoción en otras ciudades a nivel local es muy potente y la nosotros nos estamos quedando atrás. La solución es involucrar a los vallisoletanos porque si no la Semana Santa se muere», puntualiza el joven, que tras finalizar Publicidad y Relaciones Públicas estudia Periodismo en la UEMC.
Resulta complejo desmontar el mito de que la Semana Santa no interesa a los jóvenes vallisoletanos pero Rodrigo Cabezudo, como parte activa de la causa, esboza su opinión al respecto: «Los jóvenes siempre hemos tenido muchísima importancia en la Semana Santa de Valladolid. Si que es verdad que los últimos años se ha visto que ese valor se ha incrementado. Somos muchos los que nos unimos para que actos y eventos salgan adelante y desde nuestro punto de vista más actual se enriquece todo».
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El polémico cartel de Sevilla
La obra del pintor sevillano Salustiano García elegida para representar la Semana Santa de Sevilla 2024 no ha estado exento de polémica desde el día de su presentación. En el cartel se representa un Cristo coronado cubierto por un paño sobre un fondo rojo y el pintor sevillano inspiraba su creación en el rostro de su hijo Horacio para crear los rasgos faciales del Cristo que protagoniza el cartel. Rodrigo Cabezudo señala que «la obra no me gusta porque el estilo del autor no es algo que coincida con mis gustos. El cartel ha conseguido su objetivo y es que se hable de él y que se conozca en todos los lugares de fuera de Sevilla. Como cartel no me gusta porque algo así tiene que tener una conexión entre el mensaje y el diseño y este cartel es una pintura más del artista al que ha puesto las letras de Semana Santa de Sevilla. Esa no es la línea que se está siguiendo en otros carteles. Igual han querido arriesgar demasiado y no sé si les ha salido bien más allá de la repercusión que han tenido»
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