La Semana Santa de Valladolid en diez claves

Dos ejemplos museísticos de vida cofrade que complementan a la Magna Procesión de Valladolid: la Procesión General de la Pasión del Redentor del Viernes Santo, que este año cumple su centenario de acuerdo al impulso y reorganización del arzobispo Remigio Gandásegui. Precisamente, en relación con los prelados de la Diócesis, este año se estrenará Luis Argüello como sagrado centinela de la tradición más arraigada de Valladolid.

Principalmente para evitar cruces y evitar parones entre cofradías. El programa oficial conllevará la modificación horaria de siete procesiones para intentar ser más accesibles a todos los ciudadanos con horas no tan tardías y también para no coincidir en algunos puntos, incluidos los accesos a la Catedral, en especial en la tarde y noche del Jueves Santo donde muchas horas de entrada cambian porque además se suma el acceso de las hermandades de la Preciosísima Sangre y de la Vera Cruz, aunque ésta sin pasos. Las procesiones afectadas por cambios horarios son el Lunes Santo la Buena Muerte, y el Jueves Santo son cuatro cambios como Penitencia y Caridad, la Amargura en el Monte Calvario, la Estación Eucarística de Jesús Resucitado y la del Cristo Despojado. Los otros dos cambios corresponden con el Sábado Santo con el traslado de Nuestra Señora de los Dolores a la Seo y el Entierro de Cristo.

Respecto a los recorridos, son una decena los afectados con respecto al año pasado: la Procesión de las Palmas; Jesús de Medinaceli; la de la Piedad; la de El Humilladero o la del Verum Corpus además de la Sangre y la Vera Cruz. Una de las variaciones más significativas es que Jesús Nazareno y la Virgen de las Angustias no se encontrarán en el Vía Crucis Procesional. El Viernes Santo los cambios serán de madrugada con la Procesión de Regla de las Angustias y el Vía Crucis de la Orden Franciscana Seglar a primera hora.

La escena procesional de 'La Sentencia' va sumando personajes y este año la Cofradía de Jesús de Medinaceli, antigua de los periodistas, incorpora la talla de Poncio Pilato. La imagen hiperrealista se suma al Jesús de Medinaceli y al centurión romano estrenado el año pasado y que precisamente pertenecen a la misma escultora, la gaditana Ana Rey. Su salida procesional será el próximo Domingo de Ramos.

Luis Argüello García tomó posesión el pasado verano como nuevo arzobispo de Valladolid sucediendo en el cargo a Ricardo Blázquez y siendo, por tanto, el máximo representante de la Iglesia en Valladolid. Se estrena esta Semana Santa en su cargo y, como reza la tradición, durante el primer año de mandato, se le confiere el encargado de realizar el Sermón de las Siete Palabras que será el próximo Viernes Santo a partir del mediodía en la Plaza Mayor.

La Procesión General de la Pasión del Redentor de Valladolid es el gran baluarte, el magno desfile que reúne a las 20 cofradías de la ciudad alumbrando un total de 33 pasos que contienen a su vez un centenar de tallas. Si bien la procesión actual tiene sus orígenes en plena Guerra de la Independencia en 1810 cuando las autoridades afrancesadas asentadas en la capital vallisoletana consiguieron hacer realidad una Procesión del Santo Entierro con la unificación de las cofradías, lo cierto es que su reorganización se debe al gran restaurador de la Semana Santa de Valladolid con sus grandes pasos y el nacimiento de varias cofradías: el arzobispo Remigio Gandásegui, quien ideó el archiconocido 'museo al aire libre' y lo que significa el actual desfile del Viernes Santo. Su primera salida estaba prevista para 1922 pero la lluvia truncó el estreno que sí pudo configurarse el 30 de marzo de 1923.

La edición pasada bautizada como postpandemia y, por tanto con varios años sin desfiles procesionales y muchas ganas de participar en las calles de esta tradición, parece que sirvió de impulso a las cofradías pues todas las hermandades de la capital están registrando este 2023 muy buenos números de altas destacando los 70 de la Cofradía de la Vera Cruz; 60 de las Angustias; más de 50 nuevos cofrades en la Penitencial de la Piedad; cerca de 40 en la Preciosísima Sangre o la Orden Franciscana Seglar-La Cruz Desnuda; la prácticamente treintena de las Siete Palabras y de la Sagrada Cena o la veintena de Jesús de Medinaceli o del Atado a la Columna. Las hermandades están especialmente satisfechas y confían del mismo modo en que los espectadores, los cofrades de acera, también se incrementen en torno a nuestra tradición de Semana Santa. Junto a esto, la Junta de Cofradías insiste en pedir una mayor implicación de todos los sectores de la ciudad, en especial sobre los que más repercute esta actividad cofrade como comercio, hostelería y hotelería, dado que la Semana Santa es el acontecimiento con mayor rédito económico de cuantas actividades se organizan en el calendario anual.

La Parroquia de San Lorenzo acoge durante estos días un montaje que representa la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo conformada en un espacio de más de 30 metros cuadrados con varias decenas de figuras. Se trata de un testimonio realizado mediante el arte y estilo belenista realizado por la Familia Trebolle Liz, quienes desde hace varios años también montan en este mismo templo el tradicional belén en época navideña. Esta exposición, abierta con horario de mañana y tarde, consigue una escenografía única con momentos como La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, el Huerto de los Olivos, el Monte Calvario, Longinos o el Santo Sepulcro.

Las cofradías vallisoletanas continúan cuidando el apartado musical dentro de sus plantas procesionales significando además la hermandad entre la Semana Santa de la capital y de la provincia e incluso de Castilla y León. Y es que son prácticamente todas las bandas municipales de la provincia las que acuden estos días a arropar la devoción de la capital: La Cistérniga, Pollos, Pedrajas de San Esteban, Cigales o Medina del Campo junto con la Banda Sinfónica de Arroyo o la Agrupación Musical Iscariense. Junto a ellos diferentes capillas musicales, más castellanas con dulzainas y tambores o bandas exclusivamente de tambores o las propias de las hermandades. Mención especial también merece la Banda de Cornetas y Tambores Pureza y la Escuela Municipal de Música Mariano de las Heras que va acompañando a la Corporación Municipal y que actuó el pasado domingo bajo la batuta de Abel Moreno, autor y maestro andaluz de numerosas y conocidas marchas procesionales que se interpretan y escuchan en Andalucía pero también en Valladolid e incluso por todo el mundo.

La Sala Municipal de Exposiciones de Las Francesas acoge hasta el 16 de abril una muestra que reúne 30 obras realizadas por Juan de Juni, discípulos de su taller y seguidores que se inspiraron en su trabajo y que reflejan la enorme huella que dejó el escultor francés, germen de la obra de la Escuela Castellana del barroco con imagineros tan ilustres como Gregorio Fernández. Se trata de una exposición imprescindible, como el estilo del propio Juan de Juni, imprescindible para comprender la edad de oro de la talla castellana al incorporar el arte renacentista y del manierismo, propio de su tiempo pero anunciando a la vez el barroco.

La Iglesia de Santiago acoge durante esta Semana Santa una exposición con todos sus pasos procesionales. Seis de los siete grupos escultóricos que alumbran por las calles de Valladolid durante estos días. Todos excepto el conjunto de Sed Tengo, propiedad del Museo Nacional de Escultura, que sólo podrá verse en las calles el próximo Viernes Santo, por la mañana en el Sermón de las Siete Palabras y por la tarde en la Procesión General de la Pasión. En esta muestra, asimismo, destaca el montaje del paso En tus manos encomiendo mi espíritu, cuyo crucificado es el Santísimo Cristo de las Mercedes ubicado en sus andas para sus salidas procesionales como la del Miércoles Santo por la noche.

El reconocido especialista de fotografía cofrade, Chema Concellón, presenta la publicación 'Paso a paso', un libro recopilatorio que recoge los 65 pasos procesionales de Valladolid en una edición que significa una perspectiva global como indicó el artífice y promotor de esta obra que también contiene imágenes de los fotógrafos Pedro Muñoz y José Raúl Martín que están acompañadas a su vez por los textos de Javier Baladrón, Diego Concejo y Leia Carazo. En total 448 páginas que relatan la Semana Santa de Valladolid a través de 353 fotografías. Un cúmulo de emociones que además están prologadas por Carlos Aganzo, director de Relaciones Institucionales de El Norte de Castilla.