Semana Santa

El Nazareno estrenará este Miércoles Santo unas andas procesionales realizadas en Sevilla

Las andas representan el pasado y el presente de esta histórica penitencial fundada en 1596 en el Convento de los Agustinos Calzados de Valladolid, en la actualidad edificio ocupado por el Archivo Municipal. Desde ese momento, una dilatada historia porque la hermandad decidió independizarse de los frailes a los pocos años y, desde entonces, ha ido atesorando un rico patrimonio que una parte recibe culto en su propio templo de Jesús, junto a la Plaza Mayor, y otras obras reciben admiración el Museo Nacional de Escultura. Y estos matices de su devenir se han plasmado de diferentes maneras junto a otras reseñas de la propia Iglesia y de la procesión del Miércoles Santo en estas nuevas andas dispuestas en tres cuerpos y talladas en madera de cedro y barnizada.

Este nuevo paso será de mayor envergadura que las actuales andas, aunque el número de cargadores será el mismo: 32 personas, si bien cabe reseñar que en estos ensayos previos a las salidas procesionales el número de porteadores asciende a 60. El dorado dominante de las andas antiguas deja paso a un tallaje de estilo neoclásico, que concilia perfectamente con el estilo barroco de la Escuela Castellana de la devota imagen de Jesús Nazareno, tal y como explican desde la propia penitencial, y siguiendo la línea empleada en la carroza del Viernes Santo. Es más, paradojas de la vida, un Verdugo se complementará con otro Verdugo, porque estas andas, cuyo proyecto y talla ornamental es del sevillano Francisco Verdugo para salir en el Vía Crucis Procesional del Miércoles Santo se complementarán en las calles con la artística carroza del vallisoletano Pedro Verdugo de 1943 que se alumbra en la Procesión General de la Pasión del Viernes Santo.

Así, pensando en la morfología de la imagen de Jesús con la Cruz a cuestas, el paso tiene una estructura piramidal, realzando el protagonismo de la imagen del Nazareno así como sirviendo de altar itinerante al hombro de sus cofrades, una talla que incluso se realza más dado que lucirá en las nuevas andas con la misma histórica peana donde está colocada en su altar. Sin duda, unas andas de muchos detalles para descubrirlos por los cuatro costados con lo que desde la penitencial se anima a fijarse con más atención que nunca tanto en su salida procesional del Miércoles Santo como los días previos en que ya esté ornamentada en el interior de su templo de la calle Jesús. Será entonces cuando se exterioricen aspectos como la narración del Vía Crucis, los evangelistas, cuatro imágenes de bulto, los símbolos de la Pasión, dos capillas laterales o diferentes alusiones marianas.

Vía Crucis con detalles históricos

El Vía Crucis es lo más destacado por su volumen, conformando los dos laterales de la base de las andas. Las XIV estaciones están talladas en bajorelieve siendo obra del imaginero Antonio Troya destacando las escenas con la representación del Santo Cristo del Despojo en la X Estación y los dos sayones que se reparten la túnica de Cristo fieles a las figuras integrantes del antiguo paso grande de la cofradía, actual Sed Tengo, que procesiona la Cofradía de las Siete Palabras pero que pertenece al Museo Nacional de Escultura. Encima, en el piso superior, sendas capillas con las imágenes de la Virgen de la Soledad y Sacromonte Calvario y San José, réplica de las existentes en el templo.

Cuatro imágenes de bulto en las esquinas de las andas también resultan atractivas representando a San Pedro y San Pablo, reproducción de las dos situadas junto al altar mayor de la hermandad cuya importancia radica en que son las dos únicas imágenes que sobrevivieron al incendio del primitivo retablo barroco de 1799. Junto a ellas, San Agustín y San Nicolás de Tolentino. En la base de las andas, asimismo, en la parte frontal y trasera, sobresalen los símbolos de la pasión como el cáliz, látigo, títulus, caña, dados y columna.

La cofradía junto con los maestros talladores y escultores han dibujado la historia heredada de la cofradía hasta la actualidad en lo que significan unos siglos de muchos devenires pero con una característica perdurable en el tiempo: la devoción a Nuestro Padre Jesús Nazareno. Es por esto que tantos fieles anónimos han permitido llevar a cabo este ambicioso proyecto con sus donaciones hasta el punto de que, como aclaró el alcalde-presidente, «estamos muy satisfechos con las aportaciones». Asimismo, como significó, las donaciones siguen abiertas tanto de carácter general como con la posibilidad de donar una cantidad para los elementos específicos como las imágenes de bulto (3.190 euros), los símbolos de la pasión (400), la confección de las faldillas (800) o su propio bordado. También se puede adquirir simbólicamente uno de los cuatro faroles que tendrán las andas con una donación de 2.117,50 euros en lo que significa la aportación al conjunto de otros elementos amén de la madera como estos faroles, realizados en bronce plateado y plata en el taller Aragón Orfebres de la localidad granadina de Motril de cuerpo hexagonal y recto.