Una docena de procesiones cambiarán su recorrido esta Semana Santa en Valladolid

Y es precisamente el cambio de localización de las paradas en las que se medita sobre los momentos y sufrimientos de la pasión y muerte de Cristo lo que ha llevado a la Penitencial de las Angustias a no sacar a la imagen de Juan de Juni a la calle para coincidir con el Nazareno porque con la reorganización planteada en el entorno de Angustias pasaría de ser el final de la procesión a convertirse en la octava estación del Vía Crucis, es decir, la que corresponde con el momento de «Jesús es ayudado por el Cirineo a llevar la Cruz», un pasaje evangélico en el que la Virgen María no tiene ninguna presencia y, por tanto, no tendría un sentido estrictamente religioso, que es precisamente lo que viene a demandar en los últimos años el ahora arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, a todas las cofradías de la ciudad.

Ambas penitenciales, que son de las más antiguas de la capital y sus imágenes de las que más piedad popular concitan, coinciden en apuntar que sus posturas están razonadas precisamente en la sugerencia del prelado, «en querer dar más sentido y significado a todas sus salidas procesionales a las calles», también a este Vía Crucis Procesional del Miércoles Santo, pero los posicionamientos se alejan en el momento en que el recorrido del programa oficial no les hace coincidir: el secretario de Jesús Nazareno, Ernesto Rodríguez Monsalve, explica que si bien «es cierto» que ahora en la zona de la iglesia de las Angustias se celebra la octava estación en vez del final del desfile, «se han espacio las XIV estaciones del Vía Crucis para aprovechar el recorrido de regreso, que se hacía de todas maneras, y evitar que entre la salida y la iglesia de la Vera Cruz hubiera marcadas cuatro estaciones y entre éste punto y la iglesia de las Angustias estuvieran las diez estaciones restantes». «Hemos tratado de dar más solemnidad a la procesión, desde el principio hasta el final, hasta nuestro templo», explica Rodríguez Monsalve quien a su vez reconoce que «esta propuesta llevaba varios años planteada en el seno de la cofradía» e incluso que antes de aprobarlo consultaron con el arzobispo «y nuestro planteamiento le pareció oportuno».

El secretario de la Penitencial de las Angustias, Alejandro Carrión, por su parte, ha indicado que «el final del Vía Crucis en nuestra iglesia provocaba y justificaba la salida de la Virgen a la calle, en concreto a la puerta del templo. El acto tenía un profundo significado e incluía la bendición arzobispal». Respetando a sus hermanos nazarenos, «como no podía ser de otro modo», lo cierto es que Alejandro Carrión considera que el replanteamiento del Vía Crucis «significa una modificación sustancial de lo que ha existido hasta ahora», como ratificaron en el debate de la cuestión en la Junta de Hacienda, el órgano interno decisorio de esta hermandad, «donde se ha determinado que según el nuevo planteamiento no se justifica la salida de la Virgen. No se trata de hacer las cosas por hacer, sino que todo debe tener un significado más allá de la carga visual o estética de un determinado momento o procesión».

Aún con todo, pese a que desaparecerá de la escena vallisoletana uno de los grandes momentos procesionales en 2023, el secretario de las Angustias sí confirmo que, aunque la imagen mariana no salga a la calle esa noche del Miércoles Santo, sí harán lo propio una representación de cofrades de la Penitencial de las Angustias a la vez que «espero y deseo que el acto que se realice quede muy solemne». El secretario de Nuestro Padre Jesús Nazareno, por su lado, agradece en nombre de su penitencial «que hayan sacado a la Virgen durante todos estos años» quedando pendiente de confirmar, pendiente al tiempo de los órganos correspondientes, qué tipo de acto o celebración se hará al paso del Vía Crucis por Angustias, aunque la Virgen se quede en el interior del templo.

La Semana Santa de Valladolid en 2023 conllevará numerosos cambios tanto en horarios de procesiones como en recorridos con respecto a la última edición tal y como ha quedado aprobado en el Pleno de la Junta de Cofradías, que está integrado por las 20 hermandades de penitencia de la ciudad. En concreto, se ha aprobado la modificación horaria de siete desfiles con el objetivo de ser más accesibles a todos los ciudadanos con horas no tan tardías o simplemente para no coincidir en algunos puntos del mapa urbano, incluidos los accesos a la Catedral en especial en la tarde y noche del Jueves Santo, dado que son muchas cofradías las que han diseñado sus procesiones por las mismas calles.

Así, las procesiones afectadas por cambios horarios son: el Lunes Santo la Buena Muerte adelantará media hora su salida para hacerlo a las 22.00 horas y el Jueves Santo son cuatro cambios como Penitencia y Caridad d que se adelanta a las 18.30 horas; la Amargura en el Monte Calvario se adelanta a las 18.45 horas; la Estación Eucarística de Jesús Resucitado se adelanta a las 19.00 horas y la del Cristo Despojado, que se retrasa hasta las 21.15 horas. El resto de las modificaciones horarias corresponden en el Sábado Santo y más exactamente con el traslado de Nuestra Señora de los Dolores a la Seo, que se adelanta a las 17.00 horas; y el Entierro de Cristo, que también se adelanta a las 19.00 horas.

Respecto a las modificaciones de recorridos, por su parte, serán una decena de procesiones las que vean cambiados sus recorridos en el programa oficial con respecto al año pasado. Así, por orden cronológico, los desfiles afectados son la procesión de las Palmas, que desde Regalado accederá directamente a la calle Santiago por Constitución; Jesús de Medinaceli que evita la entrada a la plaza del Salvador; el mencionado anteriormente Vía Crucis Procesional; la de la Piedad que aún quedándose en el casco histórico varía alguna de las calles de paso; la de la Preciosísima Sangre, que este año accederá a la Catedral por primera vez en Jueves Santo; la del Cristo Despojado que acorta su recorrido de vuelta de la Seo; la de la Vera Cruz que también cambia sustancialmente su itinerario para llegar hasta la Catedral; la de El Humilladero, que recortará su trazado o la del Verum Corpus, desde la plaza de Santa Ana. Ya en Viernes Santo los cambios serán de madrugada, en la procesión de Regla de las Angustias que sustituirán Zapico y Val por la calle de la Platería para concluir esta serie de cambios con el Vía Crucis de la Orden Franciscana Seglar, al amanecer el Viernes Santo.