Santa Eulalia vibra con los Cinco Misterios

Antes de las siete de la tarde, decenas de personas de todas las edades esperaban la salida del Santísimo Cristo de la Esperanza de la iglesia de Santa Eulalia. Todavía faltaba más de una hora para el inicio de la Procesión y Oración de los Cinco Misterios, pero las ganas y la pasión podían con la paciencia mientras se preparaba la cámara para inmortalizar el momento. Mientras, en el interior del templo, los costaleros se preparaban para una de las noches más especiales del año y recibían las últimas instrucciones antes de proceder, con paciencia y cuidado, a sacar el paso del templo, con la imagen todavía tumbado, en posición horizontal.

Los primeros acordes de la banda de cornetas y tambores de la hermandad levantaron los primeros aplausos de la tarde. La banda fue este año más protagonista que nunca, hasta el punto de que giraron al Cristo hacía su posición en una de las 'levantás'. Otra, como manda la tradición, tuvo como protagonista a la alcaldesa, Clara Martín.

Con paciencia y emoción la procesión recorrió las calles del barrio. Este año, el párroco quiso acordarse de las víctimas de la violencia de género, de los accidentes de tráfico y de la pandemia. También de los vecinos fallecidos del barrio y de los fallecidos recientemente en Carbonero de Ahusín por intoxicación.

A primera hora de la tarde, tuvo lugar otro de los actos tradicionales de la Semana Santa segoviana: el vía crucis infantil de la Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad, en el barrio de San José. Una vez más, los más pequeños demostraron que también saben lo que es el sentimiento cofrade. Con la misma ilusión o más que los adultos, portaron las imágenes elegidas, más ligeras y no tan pesados que las cargadas por los adultos.

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