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Cinco días de sofoco por una inusual ola de calor para estas alturas del calendario en latitudes de la provincia de Segovia han bastado para romper la marca histórica de temperatura mínima más alta alcanzada en un mes de mayo y para despedirse con una tormenta eléctrica más propia del verano que de la primavera que descargó en la noche del sábado durante cerca de media hora, tiempo suficiente para causar estragos en algunas terrazas de la ciudad.
La lluvia arreció con vientos que llegaron a soplar a 75 kilómetros por hora, según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Esta fuerza se llevó por delante sillas, sombrillas y mesas en pleno apogeo de los relámpagos y truenos. No dio tiempo a desmontar el mobiliario y dejarlo a buen recaudo y algunos establecimientos hosteleros de la elipse segoviana se vieron sorprendidos por la potencia del viento.
Las rachas desencadenada durante la tormenta derribaron sombrillas, algún toldo e hicieron volar alguna silla mientras camareros se afanaban en recoger el mobiliario exterior de los bares y restaurantes. Fue el viento más que la lluvia el que provocó la única salida registrada por los Bomberos de Segovia en la tarde-noche de este sábado relacionada con la tormenta. Según informan, acudieron a la carretera de San Rafael a retirar una rama arrancada por esas fuertes ráfagas.
Así, entre rayos y truenos se despidió la primera ola de calor de la temporada, que se ha anticipado este año a la época en la que este fenómeno es más habitual en la provincia. El director responsable de Meteosegovia.es, Adrián Escobar, confirma a través de las redes sociales del portal especializado que este episodio ha dejado tras de dos récords consecutivos de «noche tropical» en la ciudad. En la madrugada del jueves al viernes se registraron 21,4 grados y se superó la anterior marca de temperatura mínima en un mes de mayo, que databa del año 1947 con 20 grados. El último precedente de noche tan calurosa para el quinto mes no cae muy lejano, ya que en 2017 se llegaron a los 19,1º.
El récord de nuevo cuño ha durado solo un día, ya que en la madrugada siguiente, la del viernes al sábado, el termómetro no bajó de 22º, según los valores publicados por Adrián Escobar a partir de los datos de la Agencia Estatal de Meteorología. Dos noches seguidas de clima tropical en la capital y en mayo, algo anómalo si se atiende a las series históricas.
La máxima alcanzada por el mercurio en este episodio de ola de calor se produjo el viernes 20, cuando la canícula elevó el termómetro hasta los 32,6 grados, a tenor de la información de la Aemet. Se quedó cerca de otra marca, que esta vez no ha caído, que es la de la máxima temperatura soportada por los segovianos en un mes de mayo, que se dio en el año 2001 y fue de 33,2º.
El descenso térmico de algo más de diez grados que se ha registrado este domingo certifica el final de la ola de calor que ha apretado en los últimos días acompañada de calima, que también ha dejado noches tropicales, con mínimas por encima incluso de los 24 grados, en otros puntos de la provincia, como Palazuelos de Eresma u Otero de Herreros, tal y como indica Adrián Escobar.
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Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui
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