Secciones
Servicios
Destacamos
El relato de Pablo Hernández, el alumno del Mariano Quintanilla que logró en 2015 la mejor nota de la provincia en las pruebas de acceso a la universidad, es que la excelencia académica no llegó a costa de su felicidad. Recuerda con una sonrisa esos ... tiempos casi una década después mientras estudia en Berlín su doctorado de Física Experimental en Nanotecnología. Un presente que también le sonríe. «La verdad es que he sido feliz siempre, he tenido bastante suerte». Lo dice alguien que peregrinó aquel año religiosamente los viernes y los sábados por las discotecas, lejos de la vida monacal que sugiere su calificación. «Salía todos y hasta tarde. No recuerdo ese año como mucho más duro, era buena vida. Me llevaba muy bien con la gente de mi clase, sigo manteniendo mi grupo de amigos… La vida fácil».
¿Qué hay detrás de una nota tan alta? «Es el resultado de trabajar constantemente durante todo el curso, tampoco hace falta matarse o encerrarse en la habitación». Habla de método, de rutina, para no necesitar esfuerzos sobrehumanos. Vivía en Segovia, las distancias eran cortas. Se echaba algo de siesta y completaba las tardes con clases de alemán o de pintura. «Estudiaba de lunes a viernes, sin más. Cenábamos tarde, como a las diez, y rara vez estudiaba después». Y que aquello suponía más un placer que un esfuerzo. «Más que talento, algo que a lo mejor no todo el mundo tenía es que a mí me interesaba genuinamente todo». Le gustaba tanto escribir que contempló el periodismo, pero terminó para su sorpresa en Física, quizás lo que menos le llamaba. «Un mes antes de selectividad no tenía ni idea de lo que iba a hacer».
Y el valor de la familia, el ejemplo de sus cuatro hermanos –es el menor de los cinco– y el incentivo de sus padres. «Nos dieron muchísimo apoyo, nos animaron un montón a estudiar. Oportunidades para aprender idiomas, interesarnos por otras cosas. Les ves mucho leer, aprender cosas… La familia fue todo, mis hermanos son increíbles». Sus carreras no han desmerecido su talento: uno trabaja en el Ministerio de Economía y mientras entre sus hermanas tiene a una profesora de español, una abogada y una empleada de la Biblioteca Nacional.
Noticia relacionada
Luis Javier González
Con ese repaso, resta valor a la fama de las mejores calificaciones. «En realidad es una chorrada. Tienes una nota muy alta y luego puedes acabar en cualquier lado. Y con una nota que no parece tan buena puedes ir a un trabajo de la leche». Pablo era parte de una clase de alumnos sobresalientes que además eran amigos. «Había muy buen ambiente. Si te interesaba lo que decía el profesor, podías preguntar sin cortarte, sin parecer que fueras un empollón. Todo el mundo se pasaba todo para los exámenes en el grupo de WhatsApp. La gente se ayudaba un montón». Con todo, tuvo suspensos. «Creo que alguno de mates». Quizás la música sea su talón de Aquiles: tocaba el chelo, repitió un año y lo acabó dejando.
Cuenta que su progresión académica fue de menos a más. «Al principio de la ESO no sacaba tan buenas notas y luego fue mejorando». Y que en su primer año en Física los profesores bajaron del pedestal a muchos alumnos excelentes. «Habían sacado una nota increíble en selectividad y en el primer examen suspendieron a todos. Yo saqué un 2 o un 3. En la carrera tuve notas bastante 'mediocres' porque yo estaba haciendo mi vida de colegio mayor. Tampoco estaban mal, pero bajó muchísimo la media».
Hizo Erasmus en Alemania en su último año y olvidó sus planes de dejar la física. Se quedó a estudiar el máster y echó allí raíces. «Sacar buenas notas depende del contexto. Si tu familia no tiene para comer, es imposible». Una vez termine el doctorado puede continuar por la vía de la investigación para ser catedrático o buscar un empleo en una empresa. «Estoy en contra de pensar que vas a ser una cosa en tu vida, me mola ir probando». Porque le sigue gustando todo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.