Las sesiones 'light' dirigidas a menores abren un «atractivo» nicho de mercado

Esta iniciativa vuelve a estar entre las opciones disponibles de los empresarios hosteleros. En concreto, podrán organizar sesiones en horario de tarde –entre las 17:00 y 22:30 horas– dirigidas a jóvenes de 14 a 17 años, en las que estará prohibida la venta de alcohol y el acceso a mayores de 18 años.

«Llevamos años luchando por su regularización, que abre otro nicho de mercado», declara el gerente de la Asociación de Empresarios de Alojamiento, Hostelería y Turismo (Hotuse), Javier García Crespo. No obstante, advierte de la prudencia y cautela que los empresarios deben tener a la hora de organizar estos eventos y cumplir con las exigencias del reglamento.

Aunque la normativa es reciente, son muchos los locales segovianos –ya sean discotecas, pubs o salas de fiesta– que tienen inteción de abrir su puertas por las tardes para acoger las sesiones dirigidas a menores.

La discoteca Sabbat conoce muy bien este tipo de iniciativa. Hace diez años sus salas eran famosas entre la juventud segoviana que aún no tenía la edad apropiada para salir a estos locales por las noches. «Eran eventos que funcionaban muy bien y han tardado bastante tiempo en volver a regularlos», declara Gabriel Cobos Hernán, propietario de este negocio hostelero.

Hace años, las sesiones de baile para menores o discotecas 'light' para menores suponían un nicho de mercado muy «atractivo», sostiene. Pero las nuevas generaciones no han conocido esta propuesta de ocio ni saben en qué consiste. «Habría que empezar de cero y hacer todo lo posible para atraer a los jóvenes e invitarles a probar una nueva forma de divertirse», asegura Cobos, quien no descarta volver a organizar estas sesiones para menores.

Por su parte, la sala Mandala todavía no ha tomado una decisión sobre esta posibilidad, aunque remarca que «los jóvenes menores de edad también tienen derecho a disponer de un rato de ocio». No obstante, su gerente, Javier García Olmos, aclara que esta decisión «conlleva una gran responsabilidad».

En cualquier caso, los portavoces del sector insisten en que sería una forma de dar mayor tranquilidad a los padres, ya que sabrían que sus hijos están localizados y vigilados en todo momento y  en un espacio acotado sin la presencia de alcohol o tabaco, así como de cualquier modalidad de juego o apuesta.