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Álvaro Senovilla seguirá al frente el Balonmano Nava una temporada más. El club lo anunció ayer en el meollo de la mejor temporada de su historia, con el equipo en sexta posición de la Asobal a seis jornadas del final, en plena lucha por puestos ... europeos. La decisión del club por la continuidad de un técnico de la casa es de sentido común, un ingrediente clave para mantener su crecimiento, pues semejante campaña al frente de un recién ascendido hacían del técnico pucelano un candidato ideal para banquillos de más pedigrí.
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Luis Javier González
Será la séptima temporada de Senovilla en Nava, que dirigió al equipo dos años en Primera Nacional, rumbo al ascenso en 2014; tres en División de Honor Plata –una fase de ascenso en el curso 2014-15 y el regreso a Asobal en la campaña 2023-23– y la próxima será su segunda como técnico navero en la máxima categoría, una competición que también disputó al frente del banquillo del Villa de Aranda.
Senovilla empezó su tercera etapa en Nava en junio de 2022, procedente del banquillo del Atlético Novás. Se puso al frente de una plantilla talentosa que había descendido a División de Honor Plata bajo la dirección de Zupo Equisoain tras sumar apenas cuatro puntos en la segunda vuelta. El navarro quiso seguir, pero el club optó por el pucelano como un técnico que conocía el club y la categoría. Mantuvo a los cinco extracomunitarios con contrato en vigor –Moyano, Carró, Prokop, Smetanka y Patotski– y llevó al ascenso a la mejor plantilla de la competición, pese a que el sistema de competición complicó por momentos la vida a los segovianos por caer precisamente ante sus ex, el Novás, en casa. Fue una promoción holgada, cosechada a dos jornadas del final, aunque la liga se la llevó Puerto Sagunto.
Si el ascenso era una obligación para Senovilla, su trabajo de este curso le ha consolidado como uno de los mejores entrenadores del balonmano español. Desde la construcción de la plantilla, con un grueso del curso pasado, pero con incorporaciones a las que ha sacado rendimiento con el paso de las jornadas. Desde Ahumada en el extremo a veteranos como Isaías Guardiola o Luis de Vega, que en el último mes ha compartido minutos casi a partes iguales con Patotski, renovado hasta 2026, un salto adelante del leonés tras una primera vuelta bajo radar. El planteamiento ante el Barcelona, al que tuvo contra las cuerdas en Nava de la Asunción –llegó a ganar de cinco y mandó en el marcador hasta casi el minuto 50– fue otro plus de prestigio de un equipo que va de menos a más y que peleará mañana en su pista ante el Torrelavega el duelo de octavos de Copa del Rey a partido único en busca de la primera fase final de su historia.
Álvaro Senovilla trata los partidos y las temporadas como un esfuerzo de fondo y su plantilla ha comprado la idea. El Nava es el tercer equipo de la Asobal que más puntos suma en su pista; 19 de 24, fruto de nueve victorias, el empate ante Cangas y las derrotas ante Barça y Granollers. Una historia de remontadas. La lista de equipos que llegaron a ir ganando de al menos cuatro goles en la pista segoviana y se marcharon de vacío incluye al Puerto Sagunto, Recoletas Valladolid, Anaitasuna, Puente Genil, Torrelavega o Bidasoa Irún.
La gestión de los finales igualados ha sido otro plus del Nava. Tras dejar escapar un punto ante el Cangas en la cuarta jornada, el cuerpo técnico ha hecho una gestión eficiente de los desenlaces apretados. Victorias por un gol ante Valladolid, Puente Genil, Ademar, Bidasoa y Torrelavega. A eso hay que sumar empates de mérito a domicilio en León, Cuenca o Cangas. El único final apretado que se le escapó el Nava fue un 33-35 ante el Granollers, al que remontó siete goles. Ha puntuado en los otros diez partidos decididos por dos goles o menos.
Es el relato de una temporada de menos a más que empezó con el Nava pegado a la zona baja tras sumar seis puntos de 18 en los nueve primeros partidos. El equipo se separó de los tres últimos con al final de primera vuelta, sumando cuatro victorias y un empate en seis partidos. Y volvió a rehacerse tras las dos derrotas inmediatamente posteriores al parón invernal sumando cinco victorias y un empate en los siete últimos partidos, una racha digna de puestos europeos –mejor que la de Bidasoa, segundo– a la caza de Europa, del Ademar, con un punto más que ellos pero al que tienen ganado el average particular en caso de empate. La llegada de Gedeón Guardiola, capitán de la selección española, ha sido la guinda de puzzle: el único de los cinco partidos que el equipo no ha ganado desde su fichaje fue en la pista del Barça.
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