La Segoviana entrena en el Pedro Delgado ante el cierre del campo de La Albuera

El segundo entrenador de la Segoviana, Ricardo de Andrés, habla de una semana «atípica» tras la victoria in extremis del domingo ante el San Fernando, viento mediante. «Creo que esto va a hacer que lleguemos con muchísimas ganas al domingo, nos hemos quedado con esa sensación de dejar pasar un partido y seguramente los jugadores lo aprovechan». Su primer entrenador, Ramsés Gil, ya contaba con todos los efectivos para el duelo copero. «Es una semana en la que hemos podido bajar un poco la carga debido a la disputa del partido de Copa. Por eso estamos todos preparados, con las pilas cargadas, para un encuentro muy difícil». Ambos están empatados a 14 puntos en el cuarto puesto.

Ricardo pone en valor a un «muy buen equipo», así como su condición de invicto en su estadio, como la Sego fuera del suyo. «Es un recién ascendido a que a principio de temporada podría dar otras sensaciones, pero se ha asentado de una forma maravillosa». La circunstancia del campo, por la superficie de hierba artificial y sus reducidas dimensiones, condiciona el encuentro hasta cierto punto. «Eso no significa que no tenga argumentos para hacer un juego combinado y jugadores de mucha calidad. En su casa han sido capaces de someter a sus rivales tanto por juego directo como por juego combinativo. Así que nos espera un partido muy bonito ante un rival que nos lo va a poner muy difícil».

Pese a la efeméride de la jornada 10 del calendario, De Andrés no va más allá. «A nivel de estadísticas, no sé cómo lo valorarán los entendidos. Mi experiencia personal dice que está muy bien estar a estas alturas en buenas posiciones, pero queda todavía muchísimo. Nuestro objetivo es ir dando pequeños pasitos para que estos puntos nos valgan a final de temporada», explica.

Ante un rival con variantes, la Segoviana tiene a su comodín, Pedro Astray, que ha sido delantero centro, central y mediocentro. «A veces es difícil adaptarte a todo, pero soy un jugador muy polivalente y estoy aquí para ayudar al equipo donde me diga el míster. Me estoy sintiendo cómodo juegue donde juegue». Si le hacen elegir, escoge mediocentro, lo que ha sido «toda la vida».

El vitoriano asume que el duelo en Cobeña implica un territorio hostil para un equipo que disfruta en campos grandes de hierba natural. «Pero hemos demostrado en las anteriores salidas que somos competitivos. Desde luego, podemos llevarnos los tres puntos». Pese a la meteorología. «Vamos preparados lo mejor que se puede, con la mayor profesionalidad». Aunque sea bajo techo.