¿Por qué Segovia está cubierta de un polvo naranja?

Lluvia, potentes rachas de viento, nieve en las cumbres serranas y ahora el polvo el suspensión procedente del norte de África que se filtra en la atmósfera, deja una espesa neblina en el aire y un escenario a pie de calle más propio de Marte, con un manto fino rojizo anaranjado que alfombra suelo, mobiliario urbano, vehículos, escaparates... Este martes por la mañana se veía a los tenderos trapo, fregona y escoba en manos para limpiar lo que esa especie de rastro de barro y lodo había ensuciado.

Para muchos, la calima es un fenómeno curioso digno de alicatar las redes sociales con fotos de una ciudad que cambia el gris y el ocre por una pátina anaranjada; sin embargo, para no pocos ciudadanos, esta irrupción sahariana es un riesgo y una molestia para su salud.

El servicio de Emergencias 1-1-2 Castilla y León y la Junta advierten de que la calima que se ha instalado en el ambiente no es apta para todos los públicos. Estas fuentes explican en qué consiste la calima. «Se trata de un proceso absolutamente natural sobre el que no cabe intervención humana, salvo la adopción de precauciones para minimizar la exposición a este tipo de partículas».

Las predicciones que manejan es que «previsiblemente se puedan alcanzar valores por encima de 50 microgramos por metro cúbico como media móvil de 24 horas». Para que se entienda, esta concentración determina «una calidad del aire muy mala» para partículas de tamaño inferior a 10 micras.

Aunque la normativa de calidad del aire en España y en Europa no establece un umbral de información a la población para este contaminante, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta realiza una serie de recomendaciones para minimizar la afección de la calima en la salud. Así, para la población en general puede presentar un riesgo moderado para los segmentos de riesgo y personas sensibles. Aunque se puede disfrutar de las actividades al aire libre de manera normal, conviene vigilar la aparición de síntomas como tos, irritación de garganta, falta de aire, fatiga excesiva o palpitaciones.

Los ciudadanos que padecen enfermedades cardiorrespiratorias o alergias graves den plantearse la reducción de las actividades prolongadas y enérgicas al aire libre. Las personas con asma o enfermedades respiratorias deben seguir cuidadosamente su plan de medicación. Quienes sufren alguna dolencia de corazón pueden experimentar palpitaciones, dificultad en la respiración o fatiga inusual.

Dado que la magnitud de la intrusión de las partículas de polvo será variable en función de las horas del día y en las próximas jornadas, se recomienda que cualquier persona que vaya a realizar actividades al aire libre se informe sobre la calidad del aire en su zona. Además, se recomienda también evitar el desarrollo de acciones tales como la quema al aire libre de restos vegetales y, en general, cualquier actuación que pueda provocar la emisión de partículas con objeto de minimizar los efectos de este episodio de calima.

La irrupción en las últimas horas de este aire sahariano también ha traído consigo un aumento de las temperaturas. La capital segoviana ha pasado de estar al mediodía de este lunes a 6 grados a tener más de 15 en ese mismo momento 24 horas después. La calima ha elevado el termómetro entre nueve y diez grados en menos de un día.