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Segovia tiene donde escoger a la hora de zambullirse cuando el calor aprieta en la temporada estival, aunque el desfile de bañadores, toallas y sombrillas tiene un destino apabullantemente mayoritario: las piscinas. Ninguna provincia de Castilla y León, posee tantas instalaciones como la segoviana. Lo ... dicen los datos de la Junta de Castilla y León de la pasada campaña, que, a falta de recabar la disponibilidad de la presente temporada, van a ratificar ese particular y refrescante liderazgo.
A lo largo y ancho del territorio, la suma que hace la Administración autonómica en su informe sobre la calidad de las aguas de recreo concluye que hay 99 piscinas al aire libre, lo que quiere decir que añadió dos más el pasado curso con respecto a 2022, y otras 26 cubiertas. En total, el registro oficial cuenta 125. Lo que hace la Consejería de Sanidad en su análisis es extraer la proporción de vasos para el chapuzón y habitantes que pueblan cada provincia. Y Segovia se encarama a la cabeza de la comunidad autónoma con una ratio de una piscina por cada 1.243 personas.
99 piscinas
en la provincia de Segovia son de titularidad pública, según el informe de aguas de recreo de la Junta de Castilla y León del año pasado.
26 piscinas
registradas por la Junta de Castilla y León en la provincia segoviana el pasado curso son de titularidad privada, aunque suelen tener un uso público.
Además, se da una circunstancia que constata también el informe correspondiente a 2023. La mayoría de las piscinas descubiertas son públicas, gestionadas por los propios ayuntamientos que las ponen a punto para saludar la temporada alta de las vacaciones de verano. De las 99 registradas por la Junta de Castilla y León, 32 son de titularidad privada, menos de la mitad que las que son públicas. Esto no quiere decir que la utilización sea restringida, ya que suelen estar explotadas por asociaciones que la abren al uso generalizado.
En cuanto a este reparto de propiedades aplicado a las instalaciones cubiertas, son las privadas las que ganan en número a las públicas (dieciséis frente a diez), como da cuenta el informe del año pasado.
Esta abultada oferta que arroja el censo de piscinas para una demografía que no es la más nutrida de Castilla y León compensa una carencia que deja en inferioridad a Segovia en la comparación con el resto de vecinas de la comunidad. Y es que solamente disfruta de una zona apta para el baño. Es el embalse de Linares del Arroyo, en el entorno de la localidad de Maderuelo. Un emplazamiento que se mantiene en la lista de la Junta a lo largo de los últimos años, ya que es la que reúne en la provincia las condiciones que establece Sanidad para avalar la seguridad del chapuzón.
El año pasado, la relación de zonas aptas en la comunidad la conformaban 35 lugares, si se suman ríos, arroyos, embalses, lagos y hasta gargantas ubicadas en parajes naturales que disponen de ese marchamo de aptitud para el baño acreditado por la Administración regional.
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