Segovia capital diseña un plan turístico que mira a su alfoz para conseguir fondos europeos

Durante los próximos tres años, la Administración regional destinará a promover el turismo rural y urbano 115,8 millones de euros de los fondos de la UE a través de los planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia que promueve el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Para este 2021, la Junta ha elaborado el Plan Territorial de Crecimiento Inteligente del Turismo Rural en Castilla y León, dotado con 41,2 millones de euros. El año que viene habrá 44,8 millones más para relanzar y modernizar el turismo urbano, y en 2023 se dispondrán de 29,8 millones para una tercera estrategia territorial que aún está por definir. Cada uno de estos planes tendrá un periodo de desarrollo de tres años, aunque el correspondiente a 2021 podrá ejecutarse hasta el 31 de diciembre de 2024, pues no dará tiempo a ejecutar sus proyectos teniendo en cuenta que el plazo para que las entidades locales presenten las propuestas se cierra el próximo lunes, 20 de septiembre.

El Ayuntamiento de Segovia, que no concurrió hace unos meses a la convocatoria ordinaria de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos, optará ahora a la extraordinaria de 2021, pese a que está enfocada a la actividad del turismo rural, de ahí que la Concejalía de Turismo haya elaborado una propuesta con guiños al alfoz de la ciudad.

«Es un plan diseñado para todo el término municipal de Segovia que incluye los conceptos de generación, sostenibilidad y reactivación económica, y tiene el Acueducto y el agua en la base de sus intervenciones y propuestas», explicó Clara Luquero, que hizo hincapié en la necesidad que Segovia tiene de reactivar el turismo, un sector muy golpeado por la crisis de la covid-19. «Con este ambicioso proyecto queremos diversificar la oferta, alcanzar un turismo inteligente y generar recursos económicos que luego puedan repercutir en la restauración del patrimonio histórico-artístico y en la propia actividad turística», señaló. El plan cuenta con el respaldo de la Federación Empresarial Segoviana, el Cabildo de la Catedral, el Obispado, la Universidad de Valladolid, la Asociación Profesional de Guías Oficiales de Turismo, la Asociación Profesional de Turismo Rural y Activo, las tiendas de souvenirs, la Academia de Historia y Arte de San Quirce, la Academia de Artillería, el Patronato del Alcázar, IE University, las agencias de viaje, el sector hostelero y la compañía Vodafone.

Segovia Fluye, que precisa de un desembolso de 8,9 millones de euros, prevé la ejecución de una serie de proyectos distribuidos en torno a cuatro ejes: transición verde y sostenible, mejora de la eficiencia energética y gestión de los recursos, transición digital y competitividad.

El primero –desveló el concejal de Turismo, Miguel Merino– contiene una intervención destacada: la rehabilitación del Molino de la Perla, adquirido por el Ayuntamiento por cesión gratuita en la Senda de los Molinos, en el corazón de San Lorenzo. Esta reliquia del pasado, que conserva la maquinaria, es el único vestigio que queda de la primera industrialización, que utilizaba estas infraestructuras para el funcionamiento de las fábricas de harina. Además, el Ayuntamiento ha incluido en este apartado la recuperación del paisaje pintoresco del Valle del Eresma, la apertura de un centro del paisaje histórico y natural de la sierra de Guadarrama en la entidad local menor de Revenga, y la habilitación y promoción de itinerarios verdes e históricos por el alfoz de la capital, de la Fuenfría al Eresma. «Este apartado tiene un claro componente rural que enlaza con el alfoz y los barrios incorporados», puntualizó Merino.

El segundo eje, dirigido a la mejora de la eficiencia energética y la gestión de los recursos, prevé la renovación de la iluminación ornamental del Acueducto (valorada en 400.000 euros), pero también un programa de gasto eficiente de agua para el sector turístico de Segovia y el desarrollo de un modelo de calidad y sostenibilidad turística vinculado al consumo de agua y su impacto en la gestión del ciclo integral, además de una apuesta por los productos alimenticios de cercanía que insiste en el valor de las huertas existentes en los alrededores de la ciudad. La puesta en marcha de un observatorio de turismo sostenible, la dotación de Segovia como destino inteligente, la renovación de los instrumentos digitales de márquetin y comercialización turística y la creación de contenidos museísticos digitales dan forma al tercer eje, dedicado a la transición digital.

El último epígrafe –competitividad se llama– es el que más dotación económica requiere, un 48% de la inversión. Contiene el proyecto estrella del plan, la construcción del denominado Centro del Acueducto y la Cultura del Agua, pero propone un pacto local para el desarrollo de un turismo sostenible, la renovación del modelo de gobernanza (todo lo que concierne a ordenanzas municipales), una estrategia de diplomacia en patrimonio y cultura del agua, y el impulso del turismo activo y deportivo.

En la presentación estuvo presente el alcalde pedáneo de Revenga, Alfonso Nevado, que destacó la «importancia» de este núcleo de población situado a seis kilómetros de la ciudad en la gestación del Acueducto y el valor de su biodiversidad. «Revenga es el punto de partida del turismo rural hacia toda la provincia», dijo, y abogó por la recuperación de la ganadería en la zona, muy ligada al pasado histórico de Revenga y de la propia Segovia.