Segovia bate el récord histórico de lluvia para un día de mayo

La probabilidad de precipitación se incrementó con el paso de las horas, pero ningún segoviano esperaba la intensa granizada que obligó a refugiarse a multitud de paseantes y a extremar las precauciones al volante por la aparición de grandes balsas de agua en multitud de calles y carreteras. Las lluvias se repitieron a lo largo de toda la jornada, pero sacudieron la ciudad y su alfoz especialmente sobre las 15:00 y 21:00 horas. Todo ello hasta el punto de declararse 'in extremis' el aviso amarillo por riesgo de tormentas y precipitaciones.

Este repentino cambio de tiempo -por la mañana salió el sol e incluso se rozaron los 20 grados- explica la superación de la marca más alta de lluvia anotada hasta la fecha. En concreto, el récord lo ostentaba el 21 de mayo de 1994, cuando la cifra de precipitación máxima en 24 horas fue de 31,4 litros por metro cuadrado. Así lo recoge el observatorio meteorológico de Segovia, que a su vez confirma los 35,4 litros que se apuntaron este domingo.

Si bien es cierto que no es la estación que más lluvia ha notificado, ya que en su mayoría se concentran Ourense, La Coruña y Pontevedra; Segovia encabeza el listado de capitales más húmedas a causa de las tormentas. Precisamente, los datos provisionales de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) arrojan que llovió en solo una jornada la mitad de lo que suele llover en todo mayo en la capital. El promedio es de 65,7 milímetros de precipitación a lo largo de sus 31 días.

Ningún otro mes alcanza esta elevada cifra. Así, se sitúa por delante de octubre, que se coloca en segunda posición, 59 litros de media; que está seguido de noviembre, diciembre y abril. A su vez, mayo también cuenta con el mayor número de jornadas con lluvia: más de diez, aunque en 2008 se contabilizaron 23. Falta mucho para sobrepasar la marca máxima de precipitación mensual de este último año, ya que los pluviómetros segovianos notificaron hasta 150 milímetros. Por el momento, se cuentan cerca de 40 litros en la primera semana de mayo.

El sumatorio se reparte en tres jornadas: el pasado miércoles, cuando cayó un litro; el domingo, con 35,4; y este lunes, con 2,8, aunque dejó de llover en la madrugada, a partir de las 2:00 horas. En ningún caso se puede comparar con la tromba caída en el mediodía del día 5, cuando el cielo se nubló, comenzó a chispear y, unos segundos después, la situación meteorológica se tornó más adversa durante diez minutos, incluso con fuertes rachas de viento y granizo. Tras dar un pequeño respiro, la fuerte lluvia se prolongó hasta aproximadamente las 15:25 horas.

En un lapso de tiempo de apenas media hora, se recogieron cerca de 14 litros por metro cuadrado. A su vez, el mercurio de los termómetros se desplomó rápidamente desde los casi 19 grados hasta los 13,4, y no consiguió remontar en las siguientes horas del día. Los imbornales no dieron más de sí y en algunas zonas de la capital, como la calle Morillo, se cubrieron de agua hasta las aceras. No se produjeron incidencias reseñables ni hubo cortes de luz. La Aemet contemplaba en el pronóstico la recogida de aproximadamente once litros de precipitación en total, pero se superaron con creces las expectativa.