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El alcalde de la ciudad, José Mazarías, apunta que «no había ninguna razón» para que se temiera en una posible renuncia de la Segoviana a su plaza en Primera RFEF ... y recuerda que ya manifestó en varias ocasiones que el Ayuntamiento estaría al lado del equipo azulgrana. Sin embargo, no oculta las «limitaciones del Ayuntamiento» y la necesidad de atender también las peticiones de los otros 101 clubes deportivos de la ciudad.
Mazarías expone que llevan tiempo trabajando en las posibles soluciones a los tres problemas que plantea el estadio de La Albuera. «Son problemas recurrentes. Nosotros llevamos once meses y no podemos hacer lo que no se ha hecho en 42 años», señala. Se refiere así al césped de La Albuera, que no se ha cambiado ni una sola vez desde 1982. El Ayuntamiento sí lo hará. Asumirá el próximo verano la renovación de todo el terreno de juego por un importe aproximado de 400.000 euros. Para esta temporada, se espera que no haya problemas con el césped actual.
Tampoco se esperan grandes problemas con el aforo. Mazarías insiste en que no es necesario que la ampliación requerida esté lista en la primera jornada de liga. «La Federación tiene que ver que hay una voluntad», comenta el regidor. Así, el Ayuntamiento baraja un alquiler permanente de las gradas supletorias para su colocación en los fondos, pero también inicia los trámites para redactar el proyecto para la construcción de nuevas gradas detrás de una de las porterías. El coste, por el momento, es una incógnita.
La actuación más urgente será la renovación de la iluminación del estadio. Mazarías anuncia que se cambiarían las torretas de luz, una intervención que niega que cueste 800.000 euros y muestra su confianza en que la nueva instalación esté terminada en septiembre. El alcalde destaca que es un requisito imprescindible para que se puedan retransmitir los partidos y la Segoviana pueda obtener así importantes fondos económicos con el cobro de los derechos televisivos. «Nosotros no vamos a pedir nada a cambio», añadió.
Con el presupuesto cerrado, Mazarías no oculta la dificultad para encontrar las vías de financiación necesarias para llevar a cabo todas las intervenciones. «Buscaremos fórmulas», comenta. Una de las opciones es el uso de remanentes de tesorería. Pero es tajante al respecto: «Que la Sego solo se preocupe del aspecto deportivo».
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