El refuerzo de catorce ambulancias llegará a Segovia en «febrero o marzo» de 2023

La Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León emplaza a «febrero o marzo» del año que viene la incorporación de las nuevas ambulancias que reforzarán el servicio de atención de emergencias en la provincia de Segovia, como figura en el nuevo contrato de adjudicación del transporte sanitario en la comunidad autónoma. Fuentes del departamento que dirige el titular de la política sanitaria regional, Alejandro Vázquez, detallan que este plazo de entre ocho y nueve meses es el que corresponde al proceso administrativo por el que ha de pasar la licitación.

Hasta ahora, el Consejo de Gobierno de la Junta ha aprobado la tramitación de la autorización del contrato. Fue en la reunión que tuvo lugar el pasado día 16 de este mismo mes.

Fuentes de la Consejería de Sanidad añaden que el expediente ha de pasar por la fase de fiscalización y, una vez superada, pasar el trámite de la aprobación del gasto para posteriormente sacar a licitación la prestación del transporte sanitario, algo que la Administración regional confía en hacer a finales de este mes de julio que acaba de empezar.

Así pues, entre los plazos propios del recorrido administrativo y los tres meses de los que dispondrá la concesionaria para incorporar los nuevos vehículos, la ampliación de la flota de ambulancias en la provincia se va al primer trimestre del año que viene, certifican en la Consejería. Esas mismas fuentes autonómicas garantizan el transporte sanitario como se viene prestando hasta ahora a pesar de que el contrato expiró ayer. El expediente prevé la prestación del servicio «por un periodo de cuatro años con dos de posible prórroga».

La empresa concesionaria de la cobertura de urgencias y emergencias en Castilla y León asumirá la misión contractual en Segovia de incrementar la dotación vehículos. De 48 se va a pasar a 62, catorce más que los que operan a día de hoy. E iban a ser más, a tenor de la presentación que hizo la propia Junta el pasado mes de diciembre, apenas unos días antes de que el presidente, Alfonso Fernández Mañueco, anunciara la disolución de las Cortes y la convocatoria de elecciones para el 23 de febrero.

En concreto, aquel primer planteamiento contemplaba la suma de 18 nuevos vehículos para conformar al final una dotación de 66 ambulancias de diferentes características y distintas prestaciones asistenciales.

Responsables del nuevo Ejecutivo castellano y leonés han justificado la merma sufrida en seis meses (entre el pasado diciembre y este reciente junio) en la previsión de gasto dedicado al contrato del transporte sanitario en la ley de la oferta y la demanda, sobre la que influye la reapertura de consultorios locales que estuvieron cerrados provisionalmente durante los peores meses de la pandemia del coronavirus.

Esa prestación presencial en el medio rural, máxime cuando los planes de reordenación de la Atención Primaria en los que trabajó el anterior equipo de la Consejería de Sanidad encabezado por Verónica Casado retornaron al cajón, hizo que se revisasen los términos del contrato del transporte sanitario en la comunidad y se redujera el gasto programado, pasando de un importe anual de licitación de 135,4 millones de euros a otro de 118,7 millones en el conjunto de la comunidad.

Pese al ajuste a la baja, la Junta destaca del aumento de la financiación con respecto al contrato que acababa ayer en todas las provincias, incluida la segoviana, con las excepciones de Valladolid y de Burgos. El incremento en el cómputo global de la comunidad es del 55,4%, ya que hasta ahora la concesión fijaba un gasto anual de licitación de 63,3 millones de euros.

La decisión de Fernández Mañueco de enterrar los planes de reestructuración del primer nivel asistencial en el medio rural implicó en el mantenimiento de los Puntos de Atención Continuada (PAC) de urgencias y emergencias existentes. En la provincia hay seis, situados Santa María la Real de Nieva, Turégano, Ayllón, Aguilafuente, Boceguillas y Bercial, aunque la pandemia hizo que este último subcentro se trasladara a Valverde del Majano.

La dotación a mayores con la que contará la provincia a principios del año que viene, según los tiempos de la Administración autonómica, consiste en incrementar la flota de tres a ocho las ambulancias de clase C, que son las de soporte vital avanzado; las de tipo B (de soportal vital básico) sumarán dos más y pasarán de dos a cuatro; habrá tres menos que en la actualidad para el servicio del transporte programado individual (A1), que se quedará en seis, y en cuanto a las ambulancias que cubren la prestación programada colectiva, el contrato establece la incorporación de diez vehículos, por lo que esta flota en concreto asciende a 34.

El refuerzo supondrá satisfacer una antigua demanda provincial, que era la implantación de sendas ambulancias de emergencias en Cuéllar y el nordeste, siendo Boceguillas la localización a la que apunta la organización del transporte sanitario.

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