Rosario de cancelaciones de fiestas en los pueblos de Segovia y compás de espera para San Frutos

El delegado territorial de la Junta, José Mazarías, recuerda que el decreto será revisado cada semana y que, en función de la evolución de la crisis sanitaria, se pueden suavizar o endurecer las restricciones. Así, augura modificaciones durante el verano que podrían afectar a los festejos de septiembre u octubre. Además, recuerda que la Junta ha hecho recomendaciones y señala que, por ejemplo, se pueden celebrar actos como verbenas siempre y cuando se lleven a cabo ciertas medidas de seguridad que en este momento son de difícil cumplimiento.

Por otro lado, el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, indicó que la supresión de los actos festivos obedece a «una cuestión de responsabilidad pública y también tiene que ser y va ser una cuestión de responsabilidad individual», dirigiéndose especialmente a los más jóvenes para que comprendan esta medida. «Tienen que ser más responsables si cabe, para evitar contagios comunitarios que cualquier excusa festiva puede producir», señaló de Vicente en declaraciones recogidas por Ical.

La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Segovia, Gina Aguiar, afirma que todavía es pronto para conocer cómo puede afectar el decreto de la Junta a los actos de San Frutos previstos a finales del mes de octubre. Con las ferias y fiestas de San Juan y San Pedro –que debían comenzar esta semana– suspendidas, el Ayuntamiento anunció que si la evolución sanitaria era favorable la programación de San Frutos podría verse reforzada. «Tenemos todo el verano por delante para mirarlo. Hay margen», señala la responsable de Cultura de Segovia, quien recuerda que las recomendaciones de la Junta pueden cambiar cada semana. Además, afirma que para eventos como el Hay Festival o Titirimundi, previstos para septiembre, el Ayuntamiento trabajaba con unas condiciones de aforo más restrictivas de las previstas por la Administración regional.

Del 6 al 11 de agosto el barrio de San Lorenzo tenía previsto celebrar sus fiestas, una de las más multitudinarias de toda la provincia. Este viernes han convocado una asamblea para tomar una decisión definitiva sobre su suspensión, aunque el decreto de la Junta de Castilla y León empuja a la comisión de fiestas a su cancelación. «Lo decidiremos el viernes, pero es algo que se sobreentiende», afirma José Luis Segovia, presidente de la comisión.

Suspendidas desde hace días o incluso semanas las fiestas de Segovia, Cuéllar, el Real Sitio de San Ildefonso, El Espinar o Sepúlveda, el foco está puesto ahora en localidades como Carbonero el Mayor, Nava de la Asunción o Cantalejo, donde sus actos festivos también congregan a miles personas. En el caso de Carbonero el Mayor, su alcaldesa, María Ángeles García, señala que las fiestas de San Juan –que debían celebrarse esta semana– están suspendidas. Sobre las fiestas de septiembre, famosas en la provincia por su multitudinario vermú, indica que empezarán a abordar su posible suspensión en los próximos días, aunque adelanta «que haremos caso a todas las recomendaciones».

En el caso de Nava de la Asunción, sus fiestas están previstas entre el 19 y el 27 de septiembre y su alcalde, Juan José Maroto, subraya que esta misma semana esperan tomar una decisión. «Lo más probable es que las suspendamos. Toros y verbenas no habrá, pero veremos si hay alguna actividad que podamos realizar». En la misma línea se manifiesta el alcalde de Cantalejo, Javier de Lucas, quien emplaza a un estudio más detallado del decreto de la Junta para ver si hay alguna actividad del programa de fiestas que se pueda mantener. En Coca, la suspensión de las fiestas será uno de los asuntos del próximo pleno, aunque su alcalde, Mariano Herrero, anuncia que se cancelarán los festejos. «Estaba claro que era muy complicado poder celebrarlas. Hay actos en los que se concentra mucha gente. Intentaremos realizar alguna actividad pequeña», indica.

Vicente Calle espera mantener en los próximos días una reunión con las comisiones de fiestas de La Lastrilla y El Sotillo para comunicar la suspensión de las fiestas que tenían lugar en agosto y septiembre. Sin embargo, Calle afirma que se llevarán a cabo actos a partir de julio, como el cine de verano, donde sí es posible controlar el aforo y la distancia entre personas. En Villacastín, también se ha acordado durante los últimos días cancelar las fiestas previstas del 26 al 30 de agosto. Su alcalde, Julio César Sánchez, señala que tan solo se celebrará una misa en recuerdo a los difuntos por la covid-19. En Valverde del Majano, Javier Lucía mantendrá hoy una reunión con el equipo de gobierno para abordar qué hacer con las fiestas de agosto. «La idea es poder salvar alguna actividad cultural». Por su parte, Javier Gómez, alcalde de Garcillán, señala que el decreto de la Junta supone un criterio común para todos los pueblos, aunque no oculta su temor por la crispación que pueda generar cancelar los actos religiosos.