Los más pequeños piden sus deseos de última hora

Ha tenido que viajar por todo el mundo y superar algunos obstáculos estos dos años antes de alcanzar la capital segoviana, pero al fin regresa. El Cartero Real vuelve a la ciudad después de largo tiempo debido a las restricciones por la covid, de ahí que se le haya acumulado el trabajo. Este miércoles se puso manos a la obra para recoger las peticiones de los más pequeños en forma de cartas, abrazos o sonrisas, y trasladarlas inmediatamente a los Reyes Magos. La recepción se celebró en la ermita del Cristo del Mercado, donde se formaron largas colas que bajaban incluso por los peldaños de acceso al templo.

Es uno de los momentos más esperados del periodo navideño tanto por los niños como por los mayores, capaces de ver la ilusión en los ojos de sus hijos o nietos. Ya se ha convertido en tradición la apertura de las puertas de la ermita del Cristo del Mercado para recibir al Cartero Real, hasta el punto de tener que adelantar media hora el comienzo de encuentro con los niños por la gran demanda. «Este año tenemos exclusividad y se ha llenado», se alegró el presidente de la Cofradía de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz, entidad organizadora del evento, José Germán de Lara Pérez.

«Se junta todo», añadió, en referencia a que muchos de los asistentes no solo se acercaban a la ermita por el Cartero Real, sino también para visitar el nacimiento de la Asociación cultural Amigos del Belén Cristo del Mercado o para degustar un chocolate solidario. Esta última iniciativa pretendía promover la colaboración con un donativo a favor de Cáritas. «Consideramos que es lo más correcto por la situación en la que estamos», señaló el presidente.

El Cartero Real encara la recta final de su agenda. Es un trabajo arduo, sin duda. Una vez recopilados los deseos de los segovianos, tiene que clasificar y empaquetar toda la correspondencia para enviarla a los Reyes Magos, quienes en la noche de este jueves comenzarán con el reparto de miles de regalos en los hogares de la provincia. ¿Y cómo es esto posible? Como su propio nombre indica, la magia está detrás de esta labor.

Decenas de niños no quisieron perderse esta cita, ya fuese a hombros de sus padres o en carrito. Cada cierto tiempo, unos entraban y otros salían del prebisterio. El mensajero de sus Majestades atendía por varios minutos a los pequeños, muchos posaban encima de sus piernas mientras su familia capturaba el momento. Algunos más vergonzosos, otros más dicharacheros, pero todos disfrutaron de la oportunidad de poder decir en alto sus deseos y se llevaron una bolsa de gominolas de recuerdo. Entre las peticiones más populares estuvieron las videoconsolas y otros aparatos electrónicos, además de los juguetes punteros de la temporada. También resonó algún viaje a Disneyland, además de la esperanza de que sus allegados gozasen de salud y estuviesen a su lado.

Antes y después de su visita a la ciudad segoviana, el Cartero Real hizo parada en numerosos pueblos de la provincia. Es el caso de Cuéllar, donde los niños percibieron un dulce presente y muchos fueron afortunados de vales para comprar en los establecimientos cuellaranos por medio de un sorteo que se realizó entre todas las cartas entregadas. Es el paso previo de la visita de los Reyes Magos a la localidad, que comenzarán su recorrido este jueves por la mañana en las residencias, centros de mayores y Fundación Personas.

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