El gobierno municipal solo llevará los presupuestos al pleno si tiene el apoyo necesario

En la actualidad, el Consistorio permanece con los presupuestos de 2022 prorrogados, a los que ya ha añadido incorporaciones presupuestarias procedentes de transferencias corrientes y de capital. «Seguramente lo vamos a seguir haciendo», sostiene. En marzo, y tras la liquidación de las cuentas de 2022, espera incorporar otra serie de remanentes. «Las inversiones no se han paralizado, que suele ser el mayor problema en un presupuesto prorrogado», añade.

El responsable de Hacienda explica que ya se ha elaborado una segunda versión del borrador de presupuestos, cuyo montante total rondará los 66 millones de euros. A esa cifra habría que añadir los remanentes y posibles nuevas subvenciones de otras administraciones.

«Considerar probable o no que este año no haya presupuestos sería una temeridad por mi parte», afirma García Zamora tras ser preguntado por el aumento de las tensiones con Podemos-Equo. «Yo tengo la obligación de elaborar un presupuesto, poder discutirlo en el seno del equipo de gobierno y, posteriormente y como hechos en otras ocasiones, con el grupo municipal de Podemos. Si al final no hay una mayoría suficiente para aprobar el presupuesto pues no se presentará», asevera. No concreta, sin embargo, si harían pública su propuesta de presupuestos en el caso de no contar con los apoyos necesarios para su aprobación. «No me pongo en esa tesitura», concluye el edil.

Con presupuestos prorrogados o con unas nuevas cuentas aprobadas por el pleno, el Ayuntamiento de Segovia tendrá que afrontar los próximos meses sin el que ha sido su interventor durante los últimos años. Jesús García Zamora explica que durante la jornada del miércoles se produjo el cese de la persona que ha ocupado dicha plaza en el Consistorio segoviano, como consecuencia de su concurrencia al puesto de tesorero en el Ayuntamiento de Ávila.

El concejal de Hacienda asevera que, una vez producido el cese, «otra persona está haciendo las labores de interventor municipal de manera accidental. En concreto, apunta que se trata de un técnico del propio servicio de intervención, un funcionario del tipo A1 que »tiene las mismas competencias que el interventor anterior«.

Esta situación provisional se mantendrá hasta que se resuelva el concurso por parte del Ministerio de Administraciones Públicas. «Se ha solicitado ya, aunque el concurso de este año va con cierto retraso. Esperamos que no se dilate mucho», confiesa García Zamora.

El edil explica que, hasta que se celebra el concurso y se ocupa la plaza, se puede cubrir el puesto de diferentes opciones, entre las cuales está la acumulación de funciones por parte de otro habilitado nacional. «Para ello tienes que tener el visto bueno, en primer lugar de ese habilitado nacional», comenta. En este caso, el Ayuntamiento de Segovia también ha intentado que antiguo interventor pudiera compatibilizar sus nuevas funciones con las antiguas durante el tiempo que durase el proceso para su sustitución. «El Ayuntamiento de Ávila no lo ha querido. Nosotros sí que lo hicimos hace dos años con el Ayuntamiento de Ávila», lamenta.