El Pontón Alto empieza a aliviar agua

Dos semanas han bastado para que el Pontón Alto, el embalse que abastece de agua a Segovia capital y a buena parte de su alfoz, disipe todos los riesgos de problemas de suministro que se vaticinaron tras un verano más caluroso de lo habitual y con escasas lluvias. Tras recuperarse ligeramente durante el mes de octubre, desde el pasado 17 de noviembre el nivel del agua en la presa situada entre Palazuelos de Eresma y el Real Sitio de San Ildefonso no ha dejado de subir. Un 70% en menos de dos semanas. De los menos de 4,50 hectómetros cúbicos que anotaba hace poco más de diez días (y que situaban al Pontón ligeramente por encima del 50% de su capacidad), a rozar el lleno durante las últimas horas, con 7,31 hectómetros cúbicos el sábado (tiene capacidad para 7,50 hectómetros). Según los últimos datos de la Confederación Hidrográfica del Duero, se encuentra a un 98,1% de su capacidad total.

De hecho, los aliviaderos inferiores del embalse ya han comenzado a funcionar y a expulsar agua al río Eresma, que baja con su caudal más alto del año hidrológico (empieza el 1 de octubre). Hasta el pasado martes, el río transportaba agua a la salida del Pontón Alto a un ritmo de apenas 0,25 metros cúbicos por segundo; durante los tres últimos días el caudal ya registra más de 5,5 metros cúbicos por segundo.

Pero el Eresma no ha crecido solo a la salida del Pontón Alto. También a su paso por Segovia capital baja con más agua. Si a comienzos de la semana pasada ni siquiera anotaba un metro cúbico por segundo, durante el fin de semana, con el primer desembalse del otoño del Pontón, ha llegado a superar los 9,4 metros cúbicos por segundo.

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