Secciones
Servicios
Destacamos
El futuro a medio plazo en Segovia trae consigo noticias esperanzadoras. Las proyecciones realizadas sobre la población de los 209 municipios, su evolución, alejan a la provincia de la sangría demográfica que azota desde hace tiempo al conjunto regional. Si la tendencia demográfica continúa sin ... variaciones, el territorio segoviano daría la bienvenida al 2040 con algo más de 168.000 inscritos en el padrón. Todo ello gracias a la llegada de familias extranjeras, pues el pronóstico registra una disminución progresiva si se tiene en cuenta a los residentes nacidos en España.
La despoblación todavía supone una amenaza para multitud de localidades en Castilla y León. Sin embargo, no todas las provincias cuentan con una misma situación. Después de un largo periodo de pérdida de empadronados, Segovia se desliga de la caída autonómica y en apenas 15 años logrará sumar 11.300 habitantes, según la proyección que realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE), que fue publicada este lunes.
Este análisis no consiste en una predicción, pero permite diseñar un nuevo mapa provincial en lo que respecta a la población en el caso de que se mantuviesen las tendencias demográficas actuales. No sorprende, por tanto, que Segovia goce de unos datos positivos. La realidad es que el pasado mes de abril se superó la barrera de los 157.000 censados, lo que supone un incremento de cerca de un 1% respecto al mismo periodo del año anterior. Es una marca que no se alcanzaba desde finales de 2014.
El crecimiento vendría de la mano de la capital y su alfoz, de forma general. Y sobre todo de aquellas personas inmigrantes que fijan su hogar y construyen su familia en Segovia. Esto se debe a que, mientras que los extranjeros ahora suponen alrededor del 15% de la población recuento total, en 2039 la proporción se dispararía a más del 25%. Es decir, hasta un cuarto de los habitantes procederían de otros países. Este es el único motivo por el que la provincia sumaría nuevos vecinos, según la proyección. En el lado contrario, si los resultados dependieran de los nacidos en territorio nacional, entraría en números rojos, con un desplome del 5% de inscritos en el padrón.
Esto no permite combatir el envejecimiento. La base de la pirámide es cada vez más amplia. Los rangos etarios que tendrán más presencia son los más altos. En concreto, los que tienen a partir de 60 años y, sobre todo, los que entran en la década de los 70, ya que pasarían a vivir en la provincia 8.000 personas más que pertenecen a los últimos coletazos de la generación del 'baby boom'. La mayor esperanza de vida, que ahora se sitúa en algo más de 84 años, permitiría duplicar el censo de vecinos centenarios: de las 120 en 2024 a las 245 en 2039.
11.304 nuevos habitantes
lograría sumar Segovia, según la proyección de población publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
60 años
sería el rango de edad al que se adscribirían mayor número de empadronados, que estaría seguido de los 50 y 70.
En cambio, la cifra de segovianos con 40 y hasta 59 años recién cumplidos descendería significativamente. La sangría se agrava aún más entre los adolescentes y por muy poco se consigue mantener el número de empadronados de 0 a 9 años. Mientras, los veinteañeros y treintañeros también reúnen más inscritos en el padrón, pero siguen sin ser suficientes para igualar los rangos de población más elevados.
Otro aspecto destacado es que habría muchas más inscripciones de mujeres que de hombres. A día de hoy, sucede lo contrario, ya que hay más varones empadronados, aunque la diferencia es de apenas 200. La equiparación casi completa tendría lugar en 2028, mientras que en quince años, la distancia entre ambos sexos sería mucho más amplia: de aproximadamente 970 personas. El registro contabilizaría 84.500 nombres femeninos y 83.500 serían masculinos. En gran parte, esto se corresponde con la llegada de más mujeres procedentes del extranjero.
En este sentido, la inmigración se constituye como un hito para dar empuje al censo. No obstante, la inmigración se ralentizaría en el largo plazo, lo que impide pronosticar un crecimiento excepcional en el futuro. Actualmente, las oficinas de registro dan la bienvenida a una media de 3.000 extranjeros al año: son más de ocho al día, un valor que se mantendría hasta 2027 de acuerdo con la tendencia demográfica. A partir de ese momento, la acogida de residentes de otra nacionalidades decrecería hasta anotar en 2038 un máximo de 1.800.
La emigración a otros países e, incluso, a otras comunidades autónomas también es un fenómeno a tener en cuenta, pues experimentaría una ligera disminución y se lograría alcanzar un mayor asentamiento de los jóvenes y fijación de las familias. De este modo, según la evolución, se retendría a unos 250 segovianos más al cabo de doce meses, al pasar de los 1.200 abandonos de la provincia a los menos de 950 en el transcurso de quince años.
La natalidad seguiría siendo una cuestión pendiente, pese a las últimas políticas puestas en marcha para su fomento. El saldo vegetativo permanecería bajo cero. Por un lado, en los años inmediatamente posteriores la ola de nacimientos sería ascendente y se pasaría de cinco a cuatro defunciones por cada alumbramiento, aunque la cresta llegaría más pronto de lo esperado. A partir de 2034, los avances demográficos en este sentido volverían a escribirse en negativo.
1.846 defunciones
tendrían lugar a lo largo de 2039 en la provincia, lo que imposibilitaría registrar un saldo vegetativo positivo.
1.033 nacimientos
atenderían los paritorios segovianos en quince años, lo que supone un ligero incremento respecto al actual periodo.
La proyección adelanta un acortamiento de distancias entre las defunciones y los nacimientos sobre todo en la próxima década. No obstante, inevitablemente las muertes continuarán una tendencia creciente con motivo del envejecimiento de la población en la provincia. Habrá que lamentar un promedio de 1.850 fallecimientos en territorio segoviano, cuando en 1994 esta cifra se reducía a las 1.450. Y las madres gestantes cada vez serán menos, lo que repercute en una estabilización de los alumbramientos en términos comparativos que no es suficiente en aras de dar la vuelta a la ecuación.
La actividad en los paritorios de la provincia quedará muy alejada de la que había antes de la crisis económica y financiera que se desencadenó en 2008, momento en el que se anotó el pico de natalidad, con más de 1.500 recién nacidos. Ahora permanecen por debajo del millar, el cual se podría superar en 2035, pero en ningún caso regresaría el nivel de alumbramientos registrado al principios de siglo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.