Segovia

La población búlgara elige La Albuera para vivir y San José alberga a la comunidad marroquí

Hay 43 distritos diferenciados en la ciudad, según las divisiones censales. En trece de ellos, lo que se traduce en casi un tercio, el dato de segovianos que cuentan con nacionalidad extranjera se sitúa por encima del 15%. De hecho, hay algunas manzanas en las que hasta un 31% de sus habitantes son personas inmigrantes, como es el caso de la parte baja de San José. Esta es una de las secciones de la capital con más personas jóvenes -especialmente niños- por metro cuadrado. Lo contrario sucede en la zona más próxima al Conservatorio de Música de Nueva Segovia, donde solo el 3% de los vecinos tienen un pasaporte diferente al español.

La estadística del padrón continuo, recientemente publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), permite conocer las características de los hogares casi calle por calle. Ya no solo en referencia al número de residentes, sino también sus procedencia y sus preferencias a la hora de instalarse en la ciudad. Por ejemplo, se percibe una tendencia de las diferentes comunidades de personas extranjeras a concentrarse en lugares cercanos. De ahí que una misma nacionalidad sea muy popular en alguno de los barrios, mientras que en otros apenas tenga una nimia presencia.

Según los últimos datos arrojados por este estudio, que datan de 2022, había algo más de 6.200 personas extranjeras censadas en la capital, lo que supone algo más del 12% de registros totales en el padrón. Es un punto más respecto al año inmediatamente previo y uno menos que en 2023, cuando se anotó un 13%, de acuerdo con la estadística provisional. Segovia se convierte así, al menos por tercer año consecutivo, en la capital de la región con más población originaria de otros países, seguida de cerca por Soria (12%). Quedan lejos Zamora (4%), Palencia (6%) y León o Valladolid (7%).

Si el análisis tiene como escenario los barrios -y no las secciones censales-, San José-El Palo se convierte en el área con más habitantes con otras nacionalidades (cerca de dos de cada diez). De los casi 3.500 empadronados en el barrio, 674 son extranjeros. Por tanto, no hay ningún entorno en el que la inmigración sea mayoritaria y supere en proporción a los españoles. San Lorenzo, con epicentro en su parte más baja, ostenta la segunda posición en esta clasificación según la nacionalidad de los vecinos. Los mismos números comparten Santa Teresa-Puente de Hierro, el Cristo del Mercado y El Salvador.

En la cola del listado se ubican Nueva Segovia, donde el 96% de los residentes nacieron en el territorio nacional, con gran protagonismo de la propia provincia; y los diferentes barrios incorporados, como son Zamarramala, Madrona, Perogordo, Fuentemilanos, Torredondo y Hontoria, así como la entidad local menor de Revenga. El porcentaje medio de vecinos extranjeros en estas localidades ronda el 7%.

A continuación, tanto San Marcos como San Millán coinciden en un porcentaje que también disminuye respecto a la media, al contabilizar un 9%. El recinto amurallado, Santo Tomás, Santa Eulalia, La Albuera y el barrio de Comunidad de Ciudad y Tierra se posicionan muy cerca del dato promedio que ostenta la ciudad.

Es por ello que en cada calle y plaza se pueden escuchar una amplia diversidad acentos, aunque algunos son más habituales que otros. Si se tienen como referencia los diferentes continentes, América es el que mayor protagonismo tiene en los barrios segovianos, con más de 2.400 residentes. Le pisa los talones Europa, con algo más de 2.200; África, con 1.300; y cabe destacar la menor proporción de personas asiáticas que viven en la capital -solo 243-.

La comunidad más numerosa es la búlgara, que integra más del 21% de la población extranjera. Y dos de cada diez vecinos procedentes de este país europeo -cerca de 300- han fijado su residencia en La Albuera y, en concreto, en los bloques de pisos más próximos al río Eresma. Al contrario, el recuento resultante de San Millán o el recinto amurallado solo logran alcanzar los 35.

Otra de las nacionalidades con más presencia en Segovia es la marroquí, que se ha asentado fundamentalmente en San José; y cada vez adquiere más presencia la colombiana, cuyos empadronados han fijado sus hogares en el área cercana a Las Lastras, que bordea el paseo Conde Sepúlveda, pero también adquieren cierta relevancia en La Albuera y San José.

La última procedencia que llega a superar la barrera de los 400 censados es la polaca. Más de una cuarta parte habita en Santa Teresa-Puente de Hierro, sin distinciones según la subdivisión del distrito. Por encima de los 300 destaca Venezuela, cuyos ciudadanos están instalados en el entorno de Santo Tomás o San Lorenzo; y únicamente superan el centenar de residentes la nacionalidad dominicana, peruana y rumana.

Los vecinos que han llegado de los países más cercanos, como son Francia, Italia, Portugal o Reino Unido eligen el recinto amurallado para mudarse y comenzar una nueva vida en la ciudad. Asimismo, en Segovia se conocen dos segovianos originarios de Oceanía o que son apátridas, que viven en las inmediaciones de la ermita del Cristo del Mercado y en la zona más próxima a las instalaciones deportivas de La Albuera, según especifica el INE a partir de los registros de 2022. Asimismo, tan solo hay un extranjero nacido en Nigeria; nueve en Argelia; y diez en Uruguay. Por su parte, más de la mitad de las familias chinas están alojados en Santa Eulalia.

En los próximos informes, con total probabilidad habrá destacadas variaciones. Esto se debe a que la cifra de censados ucranianos ha aumentado respecto al momento en que se recogieron los datos, lo que puede extrapolarse a otros migrantes procedentes de territorios en conflicto.