Las plazas de garaje en Segovia valen ahora casi el doble que hace diez años

El arrendamiento es más plausible porque los que adquirieron la plaza y ahora cuelgan el cartel persiguen exprimir una rentabilidad económica. «Las están alquilando a alrededor de los 85 ó 90 euros; y la venta estaría alrededor de los 20.000 y 24.000 euros dentro del casco urbano», indica el presidente de las inmobiliarias. Fuera del centro, en zonas más periféricas, el precio se abarata algo situándose entre los 16.000 y 18.000 euros. El alquiler, en estos emplazamientos más alejados ronda los 60 euros, matiza Tovar.

Son muchas las inmobiliarias que rastrean la ciudad en búsqueda de nuevas plazas de garaje a la venta. Encontrarlas es poco menos que una utopía. «Nosotros ahora estamos en Conde Sepúlveda y antes estábamos en José Zorrilla, son muchos clientes que preguntan, están muy demandadas», afirma Nuria García, de Best Segovia.

Por su parte, Miguel Tovar explica que hay dos tipos de perfiles que actualmente buscan un lugar en el que poder aparcar de forma segura. Uno responde al retrato robot de un trabajador que necesita dejar el coche en un garaje por esos mismos motivos laborales que le hacen desplazarse; el otro es de residentes en determinadas zonas. Los primeros buscan el alquiler. Los segundos anhelan más la adquisición en propiedad para poder aparcar siempre cerca de casa.

«El problema es el casco histórico y algunos barrios como La Fuentecilla, que no tienen garajes», pone de manifiesto el presidente de los agentes inmobiliarios. Es en esto supuestos donde la demanda aumenta. En cuanto al potencial arrendatario de una plaza, el perfil se adapta más al de aquellos profesionales que se desplazan, por ejemplo, desde San Cristóbal de Segovia, La Lastrilla o Palazuelos de Eresma a la capital para el desempeño de sus funciones laborales cotidianas.

La tenencia de un lugar fijo para aparcar y ahorrarse las vueltas al barrio para buscar un resquicio para dejar el vehículo ya no es la única razón detrás de la adquisición de una plaza permanente de garaje. La Unión Europea ha anunciado la prohibición de vender nuevos coches de combustión a partir de 2035. Incluso antes de la medida, los consumidores ya intuían la transición a este nuevo modelo de automóviles de carga eléctrica.

David Lozoya, de la inmobiliaria Grupo Lozoya, expone que el 'boom' detonado por las expectativas generadas a raíz de la apuesta por medios de transporte eléctricos ha provocado a su vez que la demanda de garaje haya aumentado «notablemente». «La gente se asusta porque no sabe dónde va a poder hacer la carga, los conductores miran al futuro y piensan en esto cuando se plantean comprar un coche eléctrico», revela el especialista. Esta disyuntiva se empieza a ver en el mercado dado que de manera paulatina, se está imponiendo una movilidad sostenible.

A lo largo de los últimos años, el gasto que se hace por una plaza no ha fluctuado demasiado, afirma Miguel Tovar. «El precio de los garajes está muy sostenido; no tiene una explicación lógica si se venden viviendas con plaza de garaje y el precio lo absorben entre las dos cosas», añade. Por otra parte, si el titular decide comercializar solo el estacionamiento, desde el año 2021 hasta ahora el desembolso apenas ha variado.

Otra cosa es si el espejo retrovisor de la comparación se enfoca diez años atrás. En 2010 ó 2012, por una plaza de garaje que estuviera bien situada se pagaban en torno a 12.000 euros. En este tiempo, esta opción se ha revalorizado casi el doble si la ubicación es céntrica. Tovar precisa que, normalmente, «el que tiene plaza de garaje y vivienda quiere venderlo conjuntamente».

Todavía es una incógnita si los nuevos bloques de inmuebles que se levantarán tendrán incorporada la carga eléctrica para automóviles. Lo que es una tendencia consolidada es que muchas familias disponen de varios coches. «Hay lugares donde se hacen dos plazas de garaje si hay espacio y otros que no, solo una», señala el presidente de los agentes de la propiedad inmobiliaria. Si hay cuarenta viviendas, las nuevas construcciones ya vienen con una dotación de unas sesenta plazas aproximadamente. «No todo el mundo quiere el par de estacionamientos, pero mucha gente sí», añade Tovar.