Cazado cuando circulaba a 155 kilómetros por hora en un tramo de 60

Una patrulla de la Guardia Civil del Subsector de Tráfico que realizaba un control de velocidad detectó el pasado jueves, a las 16:03 horas, un vehículo que circulaba a 155 kilómetros por hora en un tramo donde el límite máximo permitido está establecido en 60. La 'cazada' al conductor tuvo lugar a la altura del kilómetro 1,5 de la carretera CL-605, dentro del término municipal de la capital segoviana.

La Subdelegación del Gobierno advierte de que en el recorrido en el que el Instituto Armado interceptó el vehículo, donde además está señalizado el límite máximo de velocidad, se han registrado en un año seis siniestros viales, lo que da muestra «de su peligrosidad y de la necesidad de respetar las normas de seguridad vial». La carretera de CL-605 es que va desde Segovia a Arévalo, y el tramo conflictivo es antes de llegar al polígono industrial Nicomedes García de Valverde del Majano.

El Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Segovia de ha hecho cargo de la instrucción de las diligencias y de la realización de las gestiones para esclarecer los hechos, que a su vez ya han sido remitidas al Juzgado Decano de Segovia.

«Todo conductor al volante debe ser consciente de que debe circular siempre a una velocidad aconsejable a las características de la vía y a las circunstancias existentes y en cualquier caso no superar nunca las velocidades genéricas o específicas de la carretera», recuerda la Subdelegación del Gobierno. Y es que, en caso de frenada o de una maniobra brusca, debe poder controlar y detener el vehículo en la menor distancia posible, lo que se logra siempre que se transite a la velocidad que se determina en cada momento.

Este tipo de acciones negligentes y arriesgadas no solo ponen en peligro la integridad de otros usuarios de la vía, sino la propia vida y la de las personas que viajan en el vehículo, advierten las autoridades en la provincia.

• Temas
• Accidentes
• Guardia Civil
• Controles de velocidad