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El actual sacerdote de Ayllón, Emmanuel Becerra, cumple apenas un año al frente de la parroquia del municipio segoviano. En este periodo se ha enfrentado a multitud de dificultades, pero también ha vivido momentos que han traído la ilusión a sus feligreses. Uno de ellos se vivió este mismo domingo, cuando los décimos vendidos por la parroquia de Santa María la Mayor resultaron premiados con miles de euros. «Lo hicimos meramente para ayudar a las obras de la iglesia, tanto materiales como espirituales», asegura.
El templo ayllonense de estilo neoclásico, construido entre los siglos XVII y XVIII, necesita grandes inversiones en mantenimiento y conservación. El paso del tiempo ha hecho mella en sus interiores y exteriores. Su llegada al frente de la unidad parroquial de la provincia de Segovia coincidió con el comienzo de la restauración de unas vidrieras y eso ha supuesto una importate inversión. «Tenemos una deuda que pagar, que no es poca», subrayó el cura.
Por ello, las feligresas propusieron varias iniciativas para recaudar dinero en un intento de rebajar el montante total. «Dijeron de coger un número de Lotería de Navidad y yo al principio no estaba muy seguro, pero finalmente dije: hagámoslo», recordó. Fue en ese preciso momento cuando las participantes en la actividad parroquial se asesoraron sobre el procedimiento que debían seguir y, para ello, acudieron a la lotera Raquel Nieto, natural de Ayllón y cuya administración número 385, denominada La Bruja, se ubica Madrid.
Fueron entregados cientos de décimos del número 48020 que Rocío Feliux y Gloria, vecinas del municipio, se encargaron de vender a residentes y visitantes. Durante meses tuvieron la esperanza de traer la suerte a la provincia, lo que finalmente se cumplió al ser agraciados los décimos con un cuarto premio de la Lotería de Navidad. En concreto, se vendieron más de un millar de boletos que han permitido repartir 21 millones de euros por toda la comarca.
«Sentimos una inmensa gratitud a Dios por haber conseguido este don; es algo que hicimos meramente por ayudar a la parroquia y sus obras, tanto materiales como espirituales, y que nos va a ayudar a llevar a cabo todo aquello que necesitábamos», declaró emocionado Becerra, procedente de México.
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Cada décimo llevaba aparejada una recarga de tres euros para contribuir a los gastos de la parroquia. «Hay mucha gente que quiso dar además otros donativos», remarcó. La noticia del premio se tuvo lugar instantes después de las 11:00 horas, un momento muy próximo al inicio de la misa dominical. «Ha sido muy especial, no solo por tratarse del cuarto domingo de adviento, sino porque hemos aprovechado la eucaristía para hacer mención al premio y agradecer a Dios por darnos este número», manifestó. «Muchos se han quedado a la salida de la iglesia para celebrarlo», comentó la alcaldesa de Ayllón, Rosalía Martíon Pérez.
El cartel colocado a las puertas del templo que anunciaba el número vendido ahora figura también junto a la palabra «premiado». Son 20.000 euros cada décimo, a los que se suma el reintegro de veinte euros por el Gordo. El propio párroco ha sido uno de los afortunados a la hora de poder celebrar esta lluvia millonaria. Lo hacía brindando junto a Rocío, una de las impulsoras de esta iniciativa; e Iván Nieto, representante de la administración de lotería que ha emitido los boletos premiados. «Pero no nos quedemos solo con la alegría del número, pues eso termina mañana; tenemos que agradecer que, a través de eso, ahora podemos hacer cosas materiales y de ayuda a aquellas personas que lo necesitan», concluyó.
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