Miembros de la Corporación municipal durante el pleno celebrado en febrero. El Norte

Palazuelos aprueba el presupuesto y sube las dietas a los concejales tras una moción de censura frustrada

El PP, que gobierna en minoría tras romper con Cs, saca adelante las cuentas con la abstención de PSOE, Podemos, IU y DNP

Quique Yuste

Segovia

Jueves, 19 de marzo 2020, 12:02

En plena crisis por el coronavirus, el pacto de gobierno entre el Partido Popular y Ciudadanos en el Ayuntamiento de Palazuelos de Eresma ha saltado por los aires y vuelve a complicar la gobernabilidad del municipio. Después de que el alcalde, Jesús Nieto (PP), no ... pudiera sacar adelante hace un mes las cuentas municipales de 2020 por el voto en contra de los dos concejales de Ciudadanos, pertenecientes hasta la pasada semana al equipo de gobierno, los presupuestos han recibido luz verde esta semana gracias a la abstención de los ediles del PSOE y de Podemos. Esta postura, junto a la mantenidas del pleno anterior por Izquierda Unida y de Defendiendo Nuestro Pueblo (DNP), han permitido a los populares aprobar unas cuentas que han tenido el voto en contra de los dos ediles de la formación naranja.

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Para completar la ecuación lo primero que ha hecho el regidor ha sido romper con los que han sido sus socios de gobierno durante los últimos meses. Es decir, cesar al teniente de alcalde de Cs, José González, y a la concejala de Cultura, Henar Gómez, de la misma formación. En cambio, mantiene a la concejala de DNP, ausente de un pleno (está embarazada de más de ocho meses) que fue presencial. «Había problemas de entendimiento. La gota que colmó el vaso fue su voto en contra de los presupuestos. Hay una falta de confianza y de lealtad», señala Nieto sobre el cese de los concejales de Cs. «Seguir gobernando con ellos habría sido un lastre para el municipio», añade.

Así, y sin ningún tipo de negociación con la formación naranja posterior al pleno de febrero para tratar de reconducir la situación, la estrategia de Nieto ha consistido durante las últimas semanas en intentar convencer a otras fuerzas de la necesidad de sacar unas cuentas municipales adelante que puedan aplicarse una vez se supere la crisis sanitaria. Y si no lo conseguía planteaba una moción de confianza al pleno de la Corporación que finalmente no se debatió al aprobarse los presupuestos.

Las cuentas, según Nieto, son en un 90% idénticas a las presentadas en febrero, con alguna pequeña modificación que han convencido a PSOE y Podemos para cambiar su voto en contra por una abstención. En concreto, se cambia el plan de ejecución del centro social de Carrascalejo. Previsto en dos años, se amplía a tres y el dinero que se ahorra el Ayuntamiento en este ejercicio será destinado a inversiones como la mejora del acerado en la calle Escardinchal de Tabanera del Monte, a la que se destinarán 60.000 euros y que pasará a ser de un único sentido, o la sustitución del césped artificial del campo de La Mina.

Proyectos

Además, se mantienen los compromisos alcanzados con Izquierda Unida en febrero (sustitución del suelo del parque infantil, creación de un parque canino, aumentar la partida presupuestaria para ampliar el servicio de transporte metropolitano por la noche…) ya recogidos en las cuentas, así como el que tendrá lugar durante la primera modificación presupuestaria: instalar paneles laterales en las pistas polideportivas de Robledo y Carrascalejo para evitar que entre el agua cuando llueva.

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El pleno, que comenzó tras el aplauso de los concejales desde el balcón del Ayuntamiento al personal sanitario, aprobó unas cuentas que contemplan partidas para la construcción del centro social de Carrascalejo (135.000 euros en 2020), para una pista deportiva en Tabanera (135.000 euros), para la tercera fase del parque de La Mina (55.000 euros), los vestuarios de la pista deportiva de Robledo (60.000 euros), la sustitución de farolas (15.000 euros), para construir pasos de peatones elevados (21.00 euros) o para la renovación del césped artificial del campo de fútbol (50.000 euros), entre otras cuestiones. Además, durante el pleno también se aprobó un incremento de 8.000 euros anuales en las dietas de los concejales, una propuesta que contó con el voto en contra de los concejales de Izquierda Unida al considerar que hay otras prioridades, como aumentar la jornada laboral del personal municipal que realiza las labores de conserje en el colegio del municipio.

Durante la sesión los concejales mantuvieron más de un metro y medio de separación entre ellos, después de que IU hubiera solicitado al alcalde que garantizase la seguridad de los ediles. «Celebrar el pleno era necesario para evitar la paralización de la administración», asevera Nieto, quien espera aprovechar estas semanas para realizar todos los trámites técnicos y jurídicos que permitan al Ayuntamiento iniciar los proyectos aprobados una vez concluya el estado de alarma.

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Retirada 'in extremis'

«Yo creo que hay estabilidad. La ha habido durante los últimos años en los que he gobernado en minoría. Si no sería contraproducente para Palazuelos», afirma Jesús Nieto sobre la situación en la que queda el Ayuntamiento tras la reconfiguración del equipo de gobierno. Lo cierto es que su continuidad en la Alcaldía ha estado pendiente de un hilo, dado que el Partido Socialista (tres concejales), Ciudadanos (dos), Izquierda Unida (dos) y Podemos (un concejal) llegaron a principios de marzo a un principio de acuerdo para presentar una moción de censura que habría dado el bastón de mando al socialista Daniel Bravo.

El acuerdo, que preveía un equipo de gobierno formado por PSOE, Cs y Podemos y con el apoyo de Izquierda Unida ligado a diez puntos programáticos acordados con los socialistas, se rompió a escasos minutos de la presentación de la moción censura al retirarse Ciudadanos de la ecuación. «Es cierto que hemos trabajado diferentes posibilidades. Ser de centro nos permite hablar con todo el mundo, pero había cosas ilógicas que no nos terminaban de encajar», afirma José González, concejal de la formación naranja en el Ayuntamiento de Palazuelos de Eresma. No obstante, no cierra la puerta a retomar la posibilidad. «Puede ser una vía de solución en el futuro. Ahora no lo planteamos», añade González, quien considera que deben ser el PP y el PSOE los partidos que reconduzcan la situación.

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